Javelin es un sistema de armas antitanque de alcance medio, portátil y de un solo hombreLockheed Martin

Ejército de Tierra  Marruecos sube otro escalón en su rearme con la compra de 612 misiles de precisión a EE.UU.

Marruecos ha dado un nuevo paso en su constante proceso de rearme con la compra a Estados Unidos de 612 misiles antitanque Javelin. El país vecino sigue aumentando su armamento en una zona geoestratégica de especial importancia para España. No solo por lo que se refiere al equilibro en el norte de África, sino por las estrategias de Marruecos ante nuestro país. Estados Unidos subraya que la venta propuesta de este equipo y apoyo no alterará el equilibrio militar básico en la región. Lo cierto es que el impulso militar norteamericano a Marruecos se ha multiplicado en los últimos años.

El Departamento de Estado ha aprobado la venta militar, a expensas de su aprobación definitiva, de los misiles Javelin y equipos relacionados por un coste estimado de 260 millones de dólares. La Agencia de Cooperación para la Seguridad de la Defensa ha entregado ya la certificación requerida notificando al Congreso esta posible venta, que está pendiente de su visto bueno final.

Así son los misiles JavelinKindelán

En concreto, y según el Departamento de Estado, el Gobierno de Marruecos ha solicitado comprar 612 misiles Javelin FGM-148F (incluidos 12 misiles fly-to-buy y 200 unidades de lanzamiento de comando ligero Javelin (LWCLU). También se incluye en el paquete equipo de soporte, así como herramientas manuales y de medición; libros y publicaciones; equipos de distribución y energía; componentes y equipos de soporte; soporte del ciclo de vida y otra asistencia técnica; entrenamiento de artilleros; formación de oficiales de municiones; y otros elementos relacionados de logística y apoyo a programas.

Javelin es un sistema de armas de precisión versátil, que se puede emplear en una plataformaLockheed Martin

El Departamento de Estado justifica la venta afirmando que «apoyará la política exterior y la seguridad nacional de los Estados Unidos al ayudar a mejorar la seguridad de un importante aliado no perteneciente a la OTAN que continúa siendo una fuerza importante para la estabilidad política y el progreso económico en el norte de África».

Estados Unidos subraya además que «mejorará la capacidad de defensa a largo plazo de Marruecos para defender su soberanía e integridad territorial y cumplir con sus requisitos de defensa nacional. Marruecos no tendrá dificultades para absorber este equipo en sus fuerzas armadas».

Los contratistas principales serán la empresa conjunta Javelin entre Lockheed Martin en Orlando, Forida, y RTX Corporation en Tucson, Arizona. No se conocen acuerdos de compensación en relación con esta posible venta, afirma el Departamento de Estado en su reseña de la operación. También señala que la implementación de esta venta propuesta no requerirá la asignación de representantes del gobierno de los EE. UU. o de contratistas a Marruecos. Por otra parte, pronostica que «no habrá ningún impacto adverso» en la defensa de Estados Unidos como resultado de esta venta propuesta.

Javelin es uno de los principales sistemas antitanque del mundo y ha adquirido un gran protagonismo en la guerra de Ucrania. Se suele disparar desde el hombro, pero también se puede colocar en plataformas móviles. Javelin se guía automáticamente hacia el objetivo después del lanzamiento, lo que permite al artillero ponerse a cubierto y evitar el contrafuego.

Utiliza un perfil de ataque superior arqueado. Esto quiere decir básicamente que el misil sube por encima de su objetivo para mejorar la visibilidad y luego ataca donde el blindaje es más débil. Estos misiles pueden dispararse además de forma segura desde el interior de edificios o búnkeres, según asegura Lockheed Martin.

Reclamaciones permanentes

No puede olvidarse que, pese a la relación establecida por el Gobierno español con Marruecos tras el giro histórico sobre el Sáhara, Marruecos no ha dejado de mantener la presión hacia España sobre sus reivindicaciones territoriales. En julio de 2022, Mohamed VI reivindicó la entrega de Ceuta y Melilla, que sirven de plataforma para 'prácticas delictivas', pero, al mismo tiempo, manifestó la disposición de Marruecos a dialogar con España de todas las 'cuestiones en litigio'. El rey no pudo ser más claro: '(...) Marruecos no ha cesado, desde su independencia, de reclamar el fin de la ocupación por España de Ceuta, Melilla y de las islas vecinas expoliadas en el norte del reino', afirmó el rey. Para lograr este objetivo 'ha elegido seguir la vía de la razón lúcida y ha adoptado un camino pacífico y civilizado (...) instando a instituir una célula conjunta de reflexión marroquí-española para encontrar una solución al problema de esas zonas ocupadas'.

A partir de este marco conceptual, no deja de haber, de una forma u otra, una reivindicación sostenida en el tiempo. «Marruecos no cuenta con fronteras terrestres con España». Esto afirmaba el Gobierno marroquí en una carta remitida al Consejo de Derechos Humanos de la ONU en respuesta a las aclaraciones que se le habían pedido por el «uso excesivo y letal de la fuerza» contra migrantes de origen africano en los sucesos en la valla fronteriza de Melilla el 24 de junio de 2022.

Por otra parte, el Gobierno español reconoció conversaciones con Marruecos sobre la gestión del espacio aéreo del Sáhara Occidental, actualmente dependiente de los controladores de las Islas Canarias. Ya en una respuesta parlamentaria hace un año, el Gobierno admitía que estos contactos con Marruecos «se circunscriben a la gestión de los espacios aéreos», además de a la coordinación «entre ambas partes» en aras «de conseguir mayor seguridad en las conexiones y cooperación técnica».

España contra Marruecos en capacidad militarKindelán

España contra Marruecos en capacidad militarKindelán

España contra Marruecos en capacidad militarKindelán

En este contexto, La Asociación Marroquí de Derechos Humanos (AMDH) ha presentado una queja ante la ONU en la que exige «el fin de la colonización española de los territorios marroquíes mencionados» y el «derecho a la autodeterminación y a la soberanía de los pueblos sobre sus tierras». En concreto, reclama la soberanía de las ciudades autónomas españolas de Ceuta y Melilla, las Islas Canarias y cinco islotes, entre ellos Perejil, que «siguen ocupados por el Estado español».