Este es el yacimiento celta más antiguo de Galicia

Muchos pueblos del pasado se desplazaban por el mundo y establecían poblados o asentamientos en distintos territorios. Este fue el caso de Galicia, a la que llegaron distintos pueblos celtas durante la Edad de Hierro antes del año 1000 a.C.

Un poco del pasado celta de Galicia todavía se conserva y se ve en algunas leyendas antiguas gallegas, como la de Breogán, el rey celta que según la historia habría fundado La Coruña. Este pasado también se ve en distintos lugares de Galicia como Lugo, Pontevedra y Ourense, que habrían sido habitados por Celtas y dejaron restos de su presencia.

Este es el caso del Castro de Santa Tecla, un castro galaico en el monte de Santa Tecla, el más emblemático y visitado de los castros gallegos.

El Castro de Santa Tecla es un poblado situado a 341 metros de altura. En su momento de mayor esplendor, alrededor del siglo I a.C. llegó a acoger alrededor de unas 5.000 personas.

Este yacimiento arqueológico está formado por viviendas ovaladas en su mayoría, y llenas de petroglifos que datan de hace más de 2.000 años. El primer descubrimiento de Santa Tecla del que se tiene constancia fue en el año 1862. Se encontró una escultura de bronce de Hércules. Luego, a mediados del siglo XIX, se empezó a valorar más, por lo que comenzó el estudio de este lugar. Esto llevó a que Manuel Murguía, historiador y escritor español, expresara en su obra Historia de Galicia que estas ruinas probablemente sean de un pueblo de la raza celta, específicamente la familia de los galos, que históricamente habitaron Irlanda y Escocia.

Los pobladores de este asentamiento serían celtas. Según los autores clásicos como Pomponio Mela y Plinio el Viejo, el extremo sudoccidental de la actual Galicia habría estado habitado por los grovios, cuya ciudad más importante habría sido Tude, actualmente Tuy. A pesar de que el pueblo galaico es una familia de los celtas, no son celtas en el estricto sentido, ya que están emparentados muy remotamente. No obstante, sigue siendo un pueblo celta por tener una lengua celta o «celtizada».

Ante el reconocimiento de que el Castro de Santa Tecla se trataba de un hallazgo histórico y arqueológico, se solicitó una autorización para iniciar excavaciones, la cual fue concedida en 1914, y en la que se nombró el jefe de la excavación a Ignacio Calvo Rodríguez, del Museo Arqueológico Nacional.

Las excavaciones y los estudios continuaron liderados por Ignacio Calvo, que fue dando a conocer los descubrimientos y resultados a través de varios artículos científicos. El poblado estuvo ocupado desde la Edad de Bronce hasta la época romana.

El sitio fue declarado Monumento Histórico Artístico Nacional. Sin embargo, se abandonó su investigación siguiendo la ampliación del trazado de la carretera de subida y una reforestación que deterioro el yacimiento.

Después de años de estar olvidado por la comunidad científica, en 1983 la Xunta de Galicia y el Ayuntamiento de La Guardia iniciaron nuevas excavaciones. Además, las edificaciones conseguidas en estas excavaciones, y en las anteriores, fueron consolidadas. Estas, excavaciones sistemáticas duraron hasta 1988, y desde ese año no se realizan trabajos arqueológicos. En la actualidad puedes visitar el monte, pero su entrada no es gratuita.