Este es el puente colgantes más largo de Galicia
Este es el puente más largo de Galicia y une las provincias de La Coruña y Pontevedra
Con 80 metros de longitud y 1,5 metros de ancho cruza el río Ulla
Galicia es conocida por su naturaleza exuberante y sus paisajes únicos, que ofrece una gran variedad de rincones mágicos para disfrutar en cualquier época del año.
Uno de los atractivos turísticos con los que cuenta la comunidad gallega son los puentes colgantes. Un puñado de tablas de madera sujetas por cuerdas, que, pese a su apariencia frágil, son lo suficientemente robustos como para sostener a quienes los cruzan.
Ubicados sobre ríos, su encanto radica tanto en la sencillez de su estructura como en los impresionantes paisajes que los rodean, ofreciendo a los visitantes una perspectiva privilegiada.
En el corazón verde de Galicia se erige uno de los más impresionantes; una estructura que encarna el equilibrio entre el progreso humano y la conservación del entorno natural.
Ochenta metros separan dos provincias
Nos referimos al puente colgante de O Xirimbao es el más largo de toda Galicia, con 80 metros de longitud y 1,5 metros de ancho. Esta estructura conecta las provincias de La Coruña y Pontevedra, cruzando el río Ulla.
El puente conecta en uno de sus extremos, las parroquias de Couso en el municipio de La Estrada (Pontevedra) con la de Reis, en la localidad coruñesa de Teo.
Además, la pasarela ofrece una vista inigualable del río Ulla, cuyo cauce fluye tranquilamente bajo los pies de los visitantes, proporcionando una experiencia visual y sensorial única.
Una pasarela con mucha historia
El puente de O Xirimbao se alza sobre un paisaje que, históricamente, estuvo dedicado a la pesca del salmón, y hoy en día, sigue siendo uno de los lugares preferidos para los pescadores.
Antiguamente, el río Ulla gozaba de una gran reputación, y el coto de O Xirimbao también conocido como el Coto do Couso era conocido por la abundancia de este pescado.
La construcción del puente colgante, que se conoce como la Pasarela Mariola, fue erigido en 1964 bajo la dirección del ingeniero José Darque. El objetivo no era otro que facilita el acceso entre el coto de Ximonde y el coto do Xirimbao, dos zonas de pesca situadas a ambos lado del río Ulla.
En el año 2012, la Xunta de Galicia llevó a cabo una rehabilitación integral de esta infraestructura devolviéndole su esplendor original. Desde entonces, el puente ha ganado popularidad y es un verdadero atractivo para los amantes de la naturaleza y el senderismo.
Por otro lado, los visitantes pueden descansar en el área recreativa de O Xirimbao, una zona ideal para pasear, hacer meriendas o simplemente relajarse bajo los árboles.
Gracias a su fácil acceso y a la riqueza paisajística de su entorno, este puente se ha consolidado como una parada obligada para quienes visitan Galicia en busca de experiencias en plena naturaleza. Sin duda, una opción ideal para disfrutar en cualquier época del año cuando el entorno se viste de gala con los colores de la temporada.