La actual portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, deposita su voto durante la XVII Asamblea nacional del BNGEuropa Press

La asamblea en la que Pontón salió reelegida tuvo una bajada de participación de más del 15 % respecto a 2021

A pesar de que la formación nacionalista cosechó un mejor resultado electoral, los militantes del BNG no están tan movilizados como en 2021

El pasado mes de febrero, el BNG, liderado por Ana Pontón consiguió una importante subida de diputados en el Parlamento de Galicia. Esos cinco nuevos asientos no han asegurado a la recién reelegida líder nacionalista gallega, una etapa tranquila. Lejos de ello, las voces internas que critican su gestión se han multiplicado. Como consecuencia, la votación resultante de este pasado fin de semana reflejó una importante bajada de participación de su militancia en el proceso a pesar del aumento de protagonismo del partido en la cámara gallega.

En el año 2021, unas 3.000 personas participaron en la votación en la que Pontón fue avalada por el 99 % de los participantes como líder del partido. Ahora, en 2024, la participación ha bajado hasta las 2.500 personas, lo que se traduce en un 16 % menos de votantes.

En la cita de este pasado fin de semana, la lista de Pontón recibió el 84 % de los votos de los militantes que han acudieron a votar a la XVIII asamblea del partido. Por su parte, la liderada por la diputada autonómica, Noa Presas consiguió un 12 % de los apoyos, de forma que contará con dos puestos en la ejecutiva de la formación. En concreto, formará parte de este órgano la propia Noa Presas y el edil de La Coruña David Soto.

Con un 3,5 % de los votos, tendrá un puesto en la cúpula del BNG el cabeza de lista de la candidatura presentada por el colectivo 'Alicerce', el portavoz del Bloque en el Ayuntamiento de Mos, Gustavo Barcia.

Una cúpula dividida

Además, Ana Pontón tendrá que hacer frente a una Ejecutiva en la que no todos los miembros apoyan su manera de hacer las cosas.

UPG, el partido mollar del BNG envió un comunicado en el q que criticaron la tendencia al «marketing» y al «presidencialismo» de Pontón. Ahora, la cúpula de la formación cuenta con un importante porcentaje de miembros del UPG con los que la líder nacionalista tendrá que lidiar durante su nuevo mandato.

La ya reelegida como líder del partido aseguró que para mejorar los números «sólo existe un camino» y este pasa por «sumar a más personas al proyecto común». Es precisamente este discurso aperturista el que UPG criticó al considerar que se alejaba de la trayectoria histórica de las reivindicaciones nacionalistas gallegas.