Dos enormes grúas perdidas en aguas de Galicia: las claves del accidente del barco chino
Los buques mercantes pierden cada año decenas de contenedores que se caen al mar. El Consejo Naviero Mundial, principal asociación comercial marítima, asegura que en 2023 se cayeron al agua 221 de los 250 millones que se transportaron. El Toconao perdió seis el año que pasado que desencadenaron la crisis de los pélets en Galicia. El pasado fin de semana, ocurrió un suceso menos habitual: el carguero chino Shang De Wu Yi Shan perdió dos gigantescas grúas pórtico en las costas gallegas.
El protagonista de este llamativo accidente tiene una eslora total de 169 metros, una manga de 43 metros y fue botado este 2024. Es un barco de carga pesada, diseñado para mover mercancías muy grandes que no pueden ser movidas en condiciones normales.
Este carguero chino partió hace unos días de Bremen (Alemania) para transportar a Tailandia dos estructuras mecánicas del fabricante ZPMC, una compañía de China que se sitúa entre las más importantes del mundo. Se trata de dos grúas pórtico que habían sido vendidas y que se utilizan en las terminales portuarias para cargar y descargar contenedores. Su peso puede oscilar entre las 1.000 a las 2.000 toneladas.
El siniestro, en la noche del viernes
El pasado viernes, poco antes de las 23:00 horas, cuando el Shang De Wu Yi Shan navegaba frente a las costas de la provincia de La Coruña, las grúas se desprendieron por causas que todavía no han trascendido. Esto provocó que quedasen destrozadas. Parte de los amasijos metálicos cayeron al mar y el resto permanecieron en la cubierta, convertidos en chatarra.
Tras el incidente, el carguero realizó una llamada de socorro a Salvamento Marítimo, que desplegó al remolcador Alonso de Chaves y a la lancha Salvamar Betelgeuse, además del helicóptero Helimer 401.
El carguero solicitó permiso para fondear en la ría de Ares y así poder protegerse del mal tiempo.
La Sociedad de Salvamento y Seguridad Marítima (Sasemar) explicó a El Debate que se le concedió la autorización y que se procedió a la «inspección del caso». El Shang De Wu Yi Shan pudo desplazarse por sus propios medios sin problema. Una vez fondeado, en la mañana del sábado, Capitanía Marítima realizó labores de inspección.
Sasemar también señaló que «el buque solicitó abrigo durante el temporal tras informar que había sufrido un corrimiento de carga, sin especificar más».
Los restos, cerca del puerto de Ferrol
Salvamento Marítimo activó el pasado domingo una alerta tras el accidente. Desde esa fecha emite por radio una advertencia en la que indica que hay una «una estructura metálica de grúa portuaria de contenedores, de dimensiones desconocidas, sumergida» al «oeste del puerto exterior de Ferrol».
Este aviso se realiza al tratarse de un objeto sin cartografiar y que puede suponer un riesgo para el tráfico marítimo que transita por la zona. Las coordenadas que facilita a los navegantes sitúan los restos de las dos grúas en las proximidades de la bocana del acceso al puerto de Ferrol.
Mientras, el barco chino que transportaba las estructuras permanece fondeado en Ares a la espera de reunir las condiciones necesarias para poder amarrar en un puerto cercano y reparar los daños.
Informe sobre el buque
Capitanía Marítima de La Coruña, organismo dependiente del Ministerio de Transportes, elabora un informe sobre la situación que presenta el navío.
El personal técnico ya se desplazó a la embarcación para comprobar la situación y ahora están elaborando una serie de instrucciones para que el barco salga en condiciones de navegabilidad.
Dichas instrucciones les serán remitidas tanto al capitán del buque como al consignatario, que es el representante del capitán en el puerto.