La lucha por evitar el fin de los cajeros: este ayuntamiento de Galicia cede un espacio municipal a un banco
Cercedo-Cotobade (Pontevedra) temía perder este servicio financiero tras ser vendido el edificio en el que estaba instalado este sistema
Muchos municipios de Galicia viven con temor a perder un servicio tan básico como una oficina bancaria y muchos otros, donde esto ya ha sucedido, luchan, como último recurso, por conservar los cajeros automáticos para que sus ciudadanos puedan ingresar y retirar dinero. Es el caso de Cerdedo-Cotobade, un ayuntamiento de la provincia de Pontevedra que cuenta poco menos de 6.000 habitantes, que acaba de ceder a Abanca un espacio en los bajos de la Casa Consistorial ante el temor a que la entidad lo retirara de su anterior ubicación, un edificio que acaba de ser vendido.
Esta es la solución ideada por el alcalde de la localidad, Jorge Cubela, para mantener este servicio en la localidad de Carballedo, la capital municipal, tras unas negociaciones con el banco gallego en las que se insistió en la necesidad de mantener este sistema. Finalmente, las partes acordaron trasladar el cajero a un bajo del propio edificio del Ayuntamiento, a donde deberán desplazarse los clientes para realizar sus gestiones.
Abanca instaló un cajero automático de última generación que permite realizar un usuario las operaciones que considere, según explicó el Gobierno local.
En este núcleo urbano pontevedrés se vivió en 2021 una importante concentración vecinal para protestar por la decisión de la entidad financiera de cerrar la oficina bancaria. Finalmente, el cajero continuó en funcionamiento y ahora se mantendrá activo en otra ubicación próxima.