Comprar con antelación ayuda a llenar la cesta de la compra 'sin morir en el intento'

Los hogares españoles se enfrentan a la campaña navideña más cara en 20 años ya que todos los productos se han encarecido hasta niveles récord según registra la serie del Instituto Nacional de Estadística (INE) con fecha de inicio en el año 2002. Y es que estamos ante un escenario en el que la subida de precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas multiplican por más de dos la subida del IPC general de noviembre, con unos porcentajes del 15 y el 6,8 respectivamente.

A esto hay que sumar que las ayudas a la cesta de la compra prometidas desde el Ejecutivo de coalición, no podrán ser aplicadas en el momento del año en el que más se compra, la campaña navideña. Con una inflación media que triplica el incremento salarial, la pérdida de poder adquisitivo medio adquiere dimensiones difícilmente salvables en no pocas ocasiones.

Y a pesar de todo eso, la Navidad se acoge con los brazos abiertos y con muchas ganas de celebrar. Es la nueva forma de entender el aquí y el ahora, como ya se pudo ver durante el verano pasado, en el que se recuperaba la normalidad sin pensar en un mañana. Con las celebraciones navideñas se disparan los precios de unos alimentos ya de por sí mucho más caros por culpa de la inflación. Pero los ciudadanos lo festejan igual.

Desde la cadena de Supermercados Piedra señalan que es muy difícil determinar el precio medio de llenar un carrito de compra puesto que hay tantas variedades de cestas como clientes distintos y por ello «no podemos componer una cesta tipo». Ahora bien, sabiendo que nunca hay dos compras iguales, ya que varía en base al gusto del consumidor, sí hay productos que coinciden en todas las cestas y que en el caso de esta cadena cordobesa de distribución serían marisco, cava, vino, jamón, solomillo ibérico, dulces navideños, quesos, salmón ahumado, secreto ibérico y licores.

Llenar el carrito sin morir en el intento

Para realizar una «buena compra sin morir en el intento» entienden desde Piedra que hay dos factores a considerar «que son muy importantes». Por un lado estaría «la confianza y cercanía con las personas que trabajan en la tienda» en tanto que dichos profesionales siempre podrán aconsejar al cliente a su favor para que puedan detectar un ahorro importante en sus cestas. El segundo factor que ayudará a hacer una buena compra apunta a las numerosas ofertas que se realizan en estas fechas y que no se deben perder de vista.

Es una práctica habitual en las cadenas de alimentación programar acciones promocionales en fechas cercanas a la Navidad. «Desde finales de noviembre comenzamos con la oleada más importante de promociones de todo el año, dando el pistoletazo de salida con el Black Friday y siguiendo con folletos durante el mes de diciembre muy interesantes y con productos muy enfocados a estas fechas» argumentan desde el grupo empresarial. De esta manera, el cliente pueden encontrar buenos precios, adelantarse a las compras navideñas y ahorrar con ello más costes.

Previsión y anticipación

Ante los gastos extra que conllevan estas fechas, desde Facua Córdoba su presidente, Francisco Martínez, recomienda que como norma general, «seamos precisos y ajustemos la compra al número de comensales para no desperdiciar demasiada comida». Además, también ayuda comparar precios y adquirir productos que se puedan congelar para evitar la subida de precios de los últimos días.

Desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) subrayan que a veces este gasto extra se lleva a cabo en la adquisición de productos de temporada, artículos que solo se encuentran en Navidad. En otras ocasiones, el mayor gasto va destinado a productos de mayor calidad y de precio más alto, que se reservan para conmemoraciones especiales, como las que abundan estos días.

Una queja recurrente de los consumidores es que estos productos específicos suben de precio en las fechas inmediatamente anteriores a las fiestas, por lo que muchos apuestan anticiparse a ellas y realizar las compras cuanto antes. Insisten desde OCU en que, aunque los precios van incrementándose de forma casi constante desde mediados de noviembre, el ritmo se acelera más a medida que se acercan las fiestas.

En este sentido, recomiendan decantarse por alternativas menos típicas, pero algo más económicas, aunque sus precios puedan subir también algo, pero sin duda mucho menos que en los productos habituales, «no tienes por qué elegir productos caros para que sean los protagonistas de tus platos principales ya que hay opciones igual de ricas, en todos los aspectos, y mucho más asequibles» aseguran.

Es verdad que hay ganas de salir y disfrutar. Es cierto que vuelven las cenas de empresa y de amigos, amén de las familiares. Y regresan los planes para hacer escapadas al extranjero aprovechando las vacaciones de invierno. Pero, eso sí, todo mucho más caro y con un poder adquisitivo que se queda descolgado. Un carpe diem que puede estar en conflicto con la prudencia que requiere la situación actual.