Consumo responde da una serie de claves para reconocer las ventas promocionales y la publicidad engañosa y agresivaEFE

Comercio

Consumo da claves para tener unas rebajas 'tranquilas y seguras'

Este servicio recomienda a los consumidores que no se dejen llevar por publicidad que hable de pocos productos a la venta, que la oferta dura poco tiempo o que es una oportunidad única

Los consumidores y usuarios se exponen a diario a un continuo bombardeo publicitario por parte de empresas o profesionales que comercializan productos o prestan servicios a través de todos medios, una exposición a la que se suman las denominadas ventas promocionales.

Por esta razón, y ante el comienzo del periodo de rebajas, Consumo Responde considera fundamental que las personas cuenten con información para saber reconocer cuándo esta publicidad puede ser ilícita por engañosa, desleal o agresiva.

En muchas ocasiones, los periodos de rebajas o de ventas promocionales –es decir, las que ofrecen a las personas consumidoras productos en condiciones más ventajosas que las habituales en el comercio, por medio de descuentos, regalos, premios o cualquier otro tipo de incentivos– se asocian con campañas publicitarias agresivas.

Ventas promocionales

En el caso de este tipo de práctica comercial, la publicidad debe ir acompañada de información suficiente y clara sobre las condiciones y características de las ofertas, de los productos que se incluyen y del periodo de vigencia de la promoción, y su duración no puede exceder de la disponibilidad de existencias de los productos ofertados.

Las ventas promocionales pueden ser: ventas con prima (se utilizan concursos, sorteos, regalos, vales, premios o similares, vinculados a la oferta, promoción o venta de determinados artículos); ventas en rebajas (reducción de los precios habituales); ventas de saldos (productos con un valor de mercado disminuido, sea por deterioro, desperfecto, pérdida de actualidad, etc.); ventas en liquidación (de carácter excepcional, para extinguir las últimas existencias de los productos); y ventas realizadas en ferias de oportunidades (que promueven las personas comerciantes, sus asociaciones o por cualquier entidad pública o privada, celebradas del establecimiento comercial habitual).

Por otro lado, hay que tener en cuenta que las ventas en rebajas podrán tener lugar en los periodos estacionales de mayor interés comercial, según el criterio de cada comercio, y con una duración que decide libremente el establecimiento. Consumo recomienda a los consumidores que no se dejen llevar por las prisas y planifiquen bien sus compras, adquiriendo lo que realmente necesite. Es importante comparar calidades y precios de un mismo producto en distintos establecimientos, y sospechar de aquellos precios excesivamente rebajados.

Publicidad

En cuanto a la publicidad, Consumo incide en recomendaciones o pautas de conducta para poder discernir cuándo la publicidad puede ser ilícita por engañosa, desleal o agresiva. Por ejemplo, no deben adquirirse los productos o servicios por impulso en función de la publicidad; no hay que dejarse llevar o sentirse presionado por una publicidad agresiva, con mensajes que incidan en que existen pocos productos a la venta, que la oferta dura poco tiempo o que se trata de una oportunidad única; hay que conservar toda la documentación publicitaria del producto o servicio (folletos, catálogos, páginas web impresas, etc.), ya que la publicidad es vinculante y tiene carácter contractual; debe tenerse en cuenta que para el límite temporal para el que se anuncie la oferta o promoción publicitada, la entidad vendedora debe contar con existencias suficientes (de no ser así, se contará con el derecho a que se entregue el mismo producto o uno de características similares sin demoras justificadas).

Para conocer más recomendaciones sobre publicidad se puede consultar la página web de Consumo Responde.