El temor a comportamientos antidemocráticos, cada vez más creciente

Una ley de amnistía que no se recoge en el ordenamiento jurídico español. Un referéndum pactado. Una desigualdad creciente y prediseñada. Unos órganos judiciales cuestionados por su sesgo político. Y la convocatoria a un acto para protestar contra la amnistía, tildado de golpista por los que quieren perdonar a los que en su día sí intentaron dar el golpe en Cataluña, cuanto menos, invita a preocuparse por la situación que atraviesa el país.

Muestra de ello han sido las declaraciones -reflexiones-, que ha realizado el alcalde de Córdoba, José María Bellido (PP), sobre dicho contexto. Preguntado por el acto de su partido que se celebrará en Madrid el 23 y 24 de septiembre, el regidor ha valorado que”estamos viviendo un tiempo complejo”.

Eso para proseguir reclamando que «no rompamos los consensos que se construyeron en la Constitución, que fueron fruto de la reconciliación y la concordia, y son los que hoy parece que pueden estar en juego, por la simple razón de que pueden venirle bien a un candidato a la Presidencia del Gobierno». Al hilo de lo que ha afirmado que «hipotecar consensos constitucionales -los equilibrios que hemos alcanzado entre todos los españoles en los últimos 40 años-, solo por no querer renunciar a la Presidencia del Gobierno, no merece la pena». Y, además, para Bellido esto es «preocupante para el conjunto de la sociedad española».

«Hay voces que no hablan solo de la amnistía, sino de cambios en los equilibrios territoriales», ha continuado el popular, que ha recordado que hace más de 40 años los andaluces salieron a la calle (un 4 de diciembre) para reclamar la autonomía plena.

Irrenunciable

Lo que, a juicio de Bellido «quiere decir que vamos a tener los mismos derechos de autogobierno, económicos y de gestionar que cualquier otro territorio de España». Y es que, «eso que los andaluces dijimos es algo irrenunciable. Y con eso también estamos garantizando que no haya españoles de primera y de segunda, en función del territorio donde hayamos nacido, nos toque vivir».

«Tics antidemocráticos»

Pero el líder popular ha ido más allá para abundar en que, «ante estas circunstancias hacemos bien en expresarnos en la calle, diciendo que no estamos de acuerdo». Y ha profundizado en la cuentión, confiando en que «eso no se tome por nadie, como algo más que un ejercicio democrático, de libertad de expresión y de libertad política».

En ese sentido, Bellido ha confesado que «me preocupan los tics antidemocráticos que detectamos en el Gobierno de la nación». Y lo ha argumentado explicando que, «cuando anunciamos movilizaciones, manifestaciones y se tildan esos movimientos de que pueden ser golpistas (en referencia a lo que dijo la portavoz del Gobierno sobre el expresidente Aznar), alguien me tendrá que explicar por qué. Y cuando eso se liga a que se están anunciando cambios constitucionales a la remanguillé, francamente, los que tenemos que preocuparnos somos los demás».

Bellido ha sido gráfico al poner como ejemplo que «llevo más de cuatro años gobernando en Córdoba» y ha tenido que afrontar que personas a las que no les gusta su gestión, que «salen a la calle constantemente a protestar», y a él no se le ha ocurrido "nunca decir que aquellos que quieren salir a la calle y con una movilización cívica pues están en contra de las instituciones democráticas municipales”.

Pide respeto

«Reclamo y digo muy alto que espero que esta concentración se respete, por parte del Gobierno de la nación y no se discuta para qué se hace», ha sentenciado.