La plantilla de los bomberos se renueva en un tercio con la llegada de 38 nuevos efectivos
«Nos dejaremos la piel para que esta ciudad tenga el servicio que se merece», afirma uno de nuevos efectivos
El Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) cuenta desde hoy con 38 nuevos efectivos, por lo que en los últimos cinco años se ha renovado la plantilla en 58 bomberos, lo que supone la renovación de un tercio de la plantilla que en la actualidad cuenta con 165 miembros. El delegado de Seguridad, Miguel Ángel Torrico, se ha congratulado de este dato, ya que supera la ratio incluyendo las jubilaciones.
El gobierno municipal ha enmarcado este incremento de personal en la renovación de medios que se produce de forma constante, como la adquisición de nuevos vehículos o la reciente compra de equipos de protección por importe superior a un millón de euros.
«Entre todos estamos logrando prestar el servicio que la ciudad merece», ha señalado el alcalde, José María Bellido, en su intervención en el transcurso del acto celebrado en la Sala Orive, donde los nuevos bomberos han tomado posesión de sus empleos después de un proceso que no ha estado exento de incidentes, como la suspensión del tercer examen al comprobarse la venta de las preguntas. Esto provocó una renovación del tribunal así como una nueva convocatoria de la prueba.
Para los nuevos efectivos del SEIS, éste ha sido un día grande tras un duro proceso de años en el que han buscado hacer realidad su sueño. Once de ellos estaban de interinos en Córdoba, pero otros han superado la oposición de primeras o tras haber estado en otros parques de bomberos.
«El mejor trabajo del mundo»
Todas las sensaciones acumuladas por los nuevos bomberos han sido expresadas por uno de ellos, Gonzalo Moreno, quien ha afirmado la satisfacción del colectivo por alcanzar, al fin, «el mejor trabajo del mundo». Ha detallado el proceso seguido por todos, con sus dificultades y problemas, hasta alcanzar el objetivo y así lo han mostrado todos cuando en el escenario les entregaba el alcalde el casco como símbolo de su nueva condición laboral.
Gonzalo Moreno ha hablado en nombre sus compañeros y ha afirmado que a partir de ahora «nos dejaremos la piel para que esta ciudad tenga el servicio que se merece». También ha insistido en el impulso vocacional que tiene su labor en favor de la sociedad y que hace que «los bomberos no mueren, laten en los corazones de las personas que han salvado».