Retrato de Antonio GalaLa Voz

Una exposición reúne una muestra de retratos de Antonio Gala

Un grupo de artistas y fotógrafos ofrecen su visión personal sobre el escritor

La sala de exposiciones de la Fundación Antonio Gala, Espacio Gala, acoge desde el día 30 de septiembre hasta el 31 de octubre la exposición 'Cruzar miradas. Retratos de Antonio Gala', que reúne obra plástica y fotográfica de un grupo muy variado de artistas y fotógrafos que han retratado al escritor Antonio Gala a lo largo de varias décadas.

Como escribe el comisario de la muestra y artista Rafael Jiménez Reyes, «la mirada se entrecruza entre el paisaje, el objeto y quien nos mira. Aquella mirada solitaria en la que observamos nuestro entorno y como lo examinamos establece nuestra relación con el mundo y nuestra forma de estar en él. También nos define como nos miran, como somos para el resto de observadores que nos rodean.

¿Antonio miraba de un modo especial? Sin duda. No hay posibilidad de retratar lo que tenemos cerca o contarlo sin una sensibilidad fuera de lo común, una visión amplia, sin una profundidad sino pretendida, expuesta a los ojos de los demás.

La mirada de Gala

Esta exposición tributa a la forma de mirar de Gala, única y siempre viva, en confrontación a la de múltiples artistas que le retrataron y que encontraron en él, al creador, a la persona, aquella que conmovía y que mostraba a la par fuerza y vitalidad, desparpajo y seguridad, elegancia e inteligencia, e incluso vulnerabilidad cuando así lo quería.

El camino a la mirada sincera crea memoria. Cuántos Antonios. Cuántos momentos. Cuántas experiencias. Cuántos recuerdos tenemos inolvidables de una mirada, sin duda diferente.

«Se nace, supongo, para disfrutar de algo», decía Antonio.

Mirar en ocasiones es cuidar de la memoria. Más allá del parecido, del enfoque, puede que retratar sea la manera más bella y honesta de devolver la mirada desde el oficio y la manufactura de la pintura y la fotografía. Captar y devolver a quien miramos, devolver y demostrar quiénes somos.

El retrato como memoria perpetua de aquello que necesita ser contado».