Un Deportivo sin Lucas Pérez: la última oportunidad del Córdoba

A las 8 de la tarde de este domingo, el estadio del Arcángel vivirá el partido decisivo. El Córdoba CF se medirá al todopoderoso Deportivo de la Coruña en su -casi segura- última oportunidad para luchar por meterse en puestos de play-off.

Un encuentro con tintes dramáticos para un equipo que, a comienzos de enero, era líder y casi acariciaba el ascenso directo. Ahora, su entrenador, Manuel Mosquera, vivirá en su tercer partido al frente de la escuadra cordobesista uno de esos duelos a todo o nada.

«La palabra final no la utilizo, mientras haya partidos por delante, pero no le quito ningún adjetivo que denote definitivo para las aspiraciones», señalaba el técnico en la previa. Para el entrenador, el triunfo ante el cuadro gallego «es fundamental para abrir el abanico de posibilidades. Es ganar, ganar o ganar, no hay otra opción».

Sobre la falta de intensidad en los primeros compases de los partidos por parte del Córdoba, Mosquera subrayaba que, «en mi forma de entrenar tiene que venir implícito el que la salida al campo debe ser fortísima, esto en todos los sentidos. Esto no te exime de una jugada fortuita, pero marca el espíritu del partido. Una salida muy fuerte te prepara para todo tipo de jugada».

El gran ausente

Una de las claves del choque ante los coruñeses será la ausencia de su gran estrella, el delantero Lucas Pérez. En este apartado, Mosquera destacaba que que «la importancia de Lucas Pérez en el Dépor o en cualquier equipo que esté es fundamental».

Si bien, el técnico blanquiverde matizaba que su no concurso en el duelo «no es definitivo», ya que «el Dépor antes de Lucas ganaba muchos partidos porque tiene una gran plantilla». Aunque, para Mosquera «es verdad que todas las cualidades de Lucas no las tiene, por lo tanto van a tirar de otras herramientas que tenían antes». Finalmente, el entrenador del Córdoba puso como ejemplo el lanzamiento en jugadas de estrategia de Lucas Pérez y ha afirmado que, «cuando tienes un hábito con un jugador, de alguna forma hay que cambiarlo».