El Córdoba Patrimonio cae con la cabeza alta

Con la cabeza alta. Ese debe ser el sentir de la expedición del Córdoba Patrimonio de la Humanidad tras el duelo disputado en el Palacio de los Deportes de Murcia. Los blanquiverdes, pese a cosechar la primera derrota de la temporada en liga, desprendieron inmejorables sensaciones ante un equipo que suma pleno de victorias y que aprovechó la expulsión de Víctor para comenzar a decantar un choque que siempre estuvo en el aire. Tiempo ahora de tomar aire debido al parón liguero por los compromisos de la selección y preparar con detenimiento el primer derbi andaluz de la temporada. El Jaén Paraíso Interior visitará Vista Alegre el próximo 14 de octubre.

En la línea de este inicio de temporada, el Córdoba Patrimonio de la Humanidad empezó muy enchufado el encuentro, tuteando de forma descarada a todo un ElPozo Murcia Costa Cálida que se vio más que sorprendido. Pese a las ausencias, los de Josan González se mostraron intensos en defensa y descarados en la circulación de balón. Aun así, la primera opción de gol llegó a balón parado. Báez, tras un saque desde la esquina botado por Antoniazzi, estuvo a punto de batir a Juanjo con un disparo de volea. La réplica local no se hizo esperar. Gadeia estuvo muy cerca de adelantar a los charcuteros, pero se topó con un excepcional Víctor, que estrenó titularidad en tierras levantinas. Sublime el canterano.

El avanzar del cronómetro dejó a un Córdoba Patrimonio, incluso, más incisivo y valiente. Perín, con un chut cruzado, y Antoniazzi, con un disparo raso que provocó la intervención de Juanjo, rozaron el tanto antes de llegar al ecuador de acto. Toda una declaración de intenciones de la que tampoco fue ajeno el plantel murciano, que pudo adelantarse tras un derechazo de Felipe Valerio. ¿Adivinan quién apareció? Víctor.

Con ambos equipos con la amenaza del doble penalti, y en una acción sin aparente peligro, los locales desnivelaron la contienda en el 13’ de juego. Una pérdida de Perin en campo contrario posibilitó la contra de los de Javi Rodríguez. Rafa Santos, con una talentosa vaselina ante la salida de Víctor, puso el 1-0 en el electrónico. Sin embargo, el ala brasileño del Córdoba Patrimonio de la Humanidad enmendó su error tan solo un minuto después. Perin, brillante, empató la cita en el 14’ tras materializar un doble penalti tras la sexta falta de los de Javi Rodríguez. Justo premio al buen hacer de los cordobesistas, que no merecían ir perdiendo en el Palacio. El 1-1, pese a lo trepidante de los últimos minutos de primer tiempo, marcador al descanso.

El paso de vestuarios mostró a un Córdoba Patrimonio de la Humanidad igual de competitivo. Los de Josan González pudieron voltear la contienda en el 22’, momento en el que Báez, tras jugada individual, estrelló el cuero en el poste derecho de la meta de Juanjo. Pero todo se torció en el cuatro de la reanudación, momento en el que Víctor vio la segunda cartulina amarilla, por lo que fue expulsado. Con superioridad numérica en pista, ElPozo volvió a cobrar ventaja. Y de la forma más cruel. Mareco, en una acción desafortunada, introdujo con la testa el balón en su propia portería. Tocaba levantarse. Aunque poco ayudó el 3-1 de David Álvarez en el 27’.

Pero no estaba todo dicho. Perin, pese a sus molestias en el tobillo derecho, apretó el luminoso apenas un minuto después del tercer tanto charcutero. El brasileño no erró tras una acción a balón parado iniciada por Antoniazzi. Pero poco duró la alegría en seno califal ya que Marcel, tras un error de marca en una acción a balón parado, hizo el 4-2 al filo del ecuador de segundo periodo. Una lástima.

De ahí al final del envite, un protagonista: Juanjo. El veterano portero local, con sus intervenciones, evitó que los cordobesistas se metieran de lleno en el encuentro. El meta murciano evitó, en apenas un par de minutos, los goles de Antoniazzi, Guilherme y Zequi. Merecía mejor suerte el cuadro de Josan en el Palacio. Pero no la encontró. David Álvarez, en el 38’, sentenció el partido con el 5-2 cuando los de Josan jugaban de cinco. Para el anecdotario, los tantos de Marlon, en propia puerta, y el propio Álvarez a falta de seis segundos para el final.