Victoria y gran susto para el Córdoba en Melilla

Hay partidos en los que, más allá del resultado final, un susto los condiciona y ese lo dio Dragi Gudelj en el Melilla - Córdoba CF de este domingo, aunque no llegó a mayores, afortunadamente.

Los primeros compases del partido mostraron un encuentro peleado, lleno de imprecisiones y con un campo que recordaba más a un patatal que a un tapete. Sin apenas juego combinativo, una internada de Carracedo fue lo más salvable del arranque. El Córdoba no llegaba a las inmediaciones del área de su rival y el Melilla hacia su partido, tras un cuarto de hora en el Álvarez Claro.

Casi 20 minutos hubo que esperar para ver una buena jugada de ataque de los blanquiverdes, fue una asistencia de Kike Márquez que no pudo culminar Adilson. A los 27 de juego Gudelj dio un tremendo susto cuando sufrió un desvanecimiento, se recompuso, pero en seguida entraron las asistencias para llevárselo del terreno de juego. Todo recordó a lo sucedido el pasado 25 de marzo contra el Ferrol.

En ese momento se detuvo el partido y los jugadores decidieron seguir jugando el encuentro, con Carlos García sustituyendo al jugador balcánico. Tras seis minutos de parón, el choque siguió por los mismos derroteros que antes de que se produjera el incidente con Gudelj.

Segunda parte

Sin pena ni gloria se llegó al descanso, aun con el sobresalto de lo sucedido al central blanquiverde, que fue trasladado al Hospital de Melilla para ser sometido a pruebas. El segundo acto comenzó como una prolongación del primero y, pese a intentos aislados del Córdoba, la mejor ocasión llegó en el 55' para el Melilla, con un Calderón providencial para mantener el 0-0.

Tras la ocasión, Sabas daba entrada a Dani García, máximo goleador en lo que va de temporada del conjunto norteafricano.Pasada la hora de juego, los de Ania intentaron tocar y dominar algo más, intentando romper un empate que era un mal resultado, a la vista de las dinámicas dr uno y otro equipo. Y, entre tanto, Carlos García casi la lia como en el partido de Algeciras.

Pero la suerte sonrió a un Córdoba que tuvo como gran figura a Kike Márquez, que se inventó un gran pase para que Calderón pusiera el 0-1 en el marcador. Tras el tanto, Ania sacó del campo al capitán para dar entrada a Recio y reforzar así la medular blanquiverde

Triunfo trabajado

El partido siguió siendo una emboscada, una guerra en la que el fútbol permaneció en el plano de lo físico, de la batalla deportiva sin concesiones a la galería. A la par que en 78' pudo haber penalti a favor del Córdoba, pero Ruipérez Marín se lo tragó. Entre tanto, Sabas cambió el sistema para jugar con dos delanteros e intentar poner el empate a diez del tiempo reglamentario. Óscar, Vázquez y Simo saltaron al verde en ese tramo final del duelo.

Sin que pasase nada desde el gol de Calderón se llegó al descuento. Cinco minutos de alargue para una victoria (la cuarta consecutiva) que pone al Córdoba igualado a puntos con el Málaga y esperando al Castellón que, de momento, es el mejor equipo de la categoría.