Una enfermería que ha de respirar en Navidad

21 jornadas de LaLiga hacen mella. El Córdoba, con su corta plantilla, ha sufrido también la dureza y exigencia de la categoría en forma de lesiones. De hecho, al tramo final del 2024 se ha llegado muy justo y limitado en cuanto a efectivos. En ese último encuentro en el Tartiere, tan solo hubo tres efectivos de la primera plantilla en el banquillo, un dato que deja a las claras que el descanso también venía bien por ese aspecto.

La línea más tocada es la defensa. Adrián Lapeña, Carlos Albarrán, Mati Barboza y ahora Martínez están en proceso de recuperación y que pasen dos semanas hasta el último partido, debe aliviar el proceso de recuperación y no exigir más en los tiempos, aunque cada caso es distinto. A ellos se les suma Jacobo, que tampoco estuvo en Oviedo y el caso particular de Isma Ruiz, que viene forzando la rodilla durante las últimas tres semanas, según adelantó Radio Marca Granada.

Quien primero debe salir de ahí es Adrián Lapeña. El central podría haber forzado para llegar a Oviedo, pero desde el club se optó por cerrar mejor su recuperación y evitar una recaída. Cuando el equipo vuelva a los entrenamientos, Lapeña debería estar ya nuevamente con el grupo. Algo similiar pasa con Mati Barboza. Tras su recaída en Olot y según pudo saber La Voz de Córdoba, también podría haber forzado para llegar a este tramo final de año natural, pero para evitar otra recaída, se frenó su presencia en convocatoria.

Casos distintos son el de Jacobo, Martínez y Albarrán. El club no hace comunicados médicos y poco más se sabe. Tan solo de Martínez y porque se le vio en el campo, se sabe que son problemas musculares. De igual modo, van a ser dos semanas sin futbol que les van a acercar los plazos y por lo tanto el drama es menor. Luego está el caso de Isma Ruiz. Según informaron en Radio Marca Granada, el mediocentro disputó los tres últimos partidos con un esguince de rodilla y ahora el descanso será bien recibido para recuperarse de esa lesión.

Además de los jugadores con lesiones declaradas, está también el desgaste físico y psicológico. El Córdoba va a tener unas de las vacaciones navideñas más largas de los últimos tiempos y todo tiene su lógica. El equipo estuvo compitiendo hasta final de junio y las vacaciones de verano fueron más cortas de lo habitual. Ahora, con esta medida se busca 'recuperar' en cierta medida aquel déficit. Con estos nueve días de vacaciones jugadores y cuerpo técnico resetearán la mente antes de encarar la segunda parte de una categoría que ya se ha demostrado exigente.