El rodadero de los lobosJesús Cabrera

En defensa del tebeo

Con todo el respeto al mundo del cómic, que lo merece, singularizar una tipología es marginar a todas las demás

Actualizada 05:10

Las notas de prensa del Consejo de Ministros son esperadas con ilusión por todos cada semana. Hay quien está toda la mañana del martes dándole al F5 a la espera de saber qué ha aprobado el Gabinete de Pedro Sánchez, que si la ley que garantiza la atención domiciliaria a los enfermos de ELA, que si el trasvase de algún río para garantizar y abaratar la producción agroalimentaria, que si una subida a las pensiones de las viudas. Pero no, este Gobierno anda a lo suyo y además de a pelearse entre sí pierde el tiempo -y el dinero de todos- en cuestiones muy propias de quien se aburre mucho porque no se le ocurre nada brillante ni realmente bueno que hacer.

Esta semana llegaba a las redacciones de los medios de comunicación de toda España una nota de prensa que refleja cuáles son las prioridades de los ministros de Pedro Sánchez. Nada más leer el titular a uno le entraba la sensación de que ya estaban resueltos todos los problemas que sufren los españoles y que el Gobierno ahora se está dedicando a cuestiones menores, muy menores.

La noticia en cuestión -agárrense- decía que la hasta ahora dirección general del Libro y Fomento de la Lectura pasa a llamarse dirección general del Libro, del Cómic y de la Lectura. Esto es alta política, señores. Y si es torpe que lo hagan más aún lo es que lo expliquen y lo justifiquen en que con la nueva denominación «se pretende destacar y visibilizar la singularidad y las particularidades del medio del cómic dentro de ecosistema general del libro». Si hay que destacar singularidades podrían seguir por el Aranzadi, los audiolibros, las enciclopedias, los recetarios de cocina y los libritos de sopas de letras y autodefinidos, entre otros muchos, que sí que son singulares además de estar en riesgo de extinción, como el lince.

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Con todo el respeto al mundo del cómic, que lo merece, singularizar una tipología es marginar a todas las demás y «el ecosistema general del libro» se tiene que haber echado a temblar con este acuerdo del Consejo de Ministros porque quien va a salir perdiendo es el sector, como siempre ocurre.

Qué mal lo tienen que estar pasando en el Ministerio de Miquel Iceta para hacer estas cosas. En la nota de prensa recuerdan encima que no hace aún un año, el Consejo de Ministros acordó el 22 de julio pasado declarar el 17 de marzo como el Día del Cómic y del Tebeo. Son dos términos sinónimos, aunque hay quien argumenta que el primero es para adultos y el segundo para niños, por aquello de marginar un término netamente español. ¿Si han sido capaces de distinguir ambos términos para lo del 17 de marzo por qué no incluyen tebeo en el nombre de la nueva dirección general y todos contentos? Pues no. Como son así, ahora marginan el término tebeo y con él al género que tantas satisfacciones dio a varias generaciones en su infancia y adolescencia. Si el ministro Iceta no reconoce a Zipi y Zape yo tampoco lo reconozco a él.

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