No vamos a negar que lo inclusivo está de moda. Una cuestión diferente radica en compartirlo o no cuando se lleva hasta el extremo. Ríos de tinta han corrido sobre el lenguaje inclusivo desde que comenzara a hacerse popular; quizá su único fin sea el de evitar el daño que parecía causar en algunos sectores hablar en masculino genérico, algo que por otra parte, viene marcado por las normas de la lengua castellana. De hecho, la Real Academia no halló razones para un cambio de paradigma en este sentido cuando se le planteó su estudio desde el ámbito gubernamental.

Puede ser que el lenguaje inclusivo sea lo que más resuene en nuestros oídos, pero en esta línea se habla de escuela inclusiva o educación inclusiva utilizando el concepto como adjetivo y haciendo un uso a veces abusivo del término. Pero de manera general se puede hablar de inclusión, sustantivo, y hacer referencia a ello en el ámbito social, cultural o digital. Está claro que aquel que no excluye, en una cultura que se caracteriza por el descarte, en una cultura en la que brilla el desprecio…, empatiza con sus semejantes, los acepta y los incluye como iguales en aquellos aspectos en que puede hacerlo.

Hago mención a este tema cuando, inmersos en la Fiesta de los Patios, la Casa Familiar San Francisco de Asís de los Hermanos Franciscanos de la Cruz Blanca ha anunciado su conversión en un patio inclusivo, el Patio de la Inclusión como lo han querido denominar. Será el próximo domingo, con ocasión de la conmemoración de los cuarenta y cinco años de presencia en nuestra ciudad. Acostumbrados a abrir sus puertas al que lo necesita, el próximo 14 de mayo lo harán de un modo especial. Desde el mediodía se servirán bebidas y se podrá degustar un arroz a precios populares. Además han preparado actividades, un desfile de moda flamenca y las actuaciones del guitarrista, cantaor y compositor Joti de Jerez; la cantante palestina Miriam Toukan; la guitarra de Antonio Gómez; y el grupo flamenco místico carmelitano.

Entrada a la Casa Hogar de los Hermanos de la Cruz BlancaLVC

Me parece una idea magnífica puesto que es una oportunidad de lujo para conocer la realidad de la Casa Familiar y de la Fundación que atienden de manera impecable a personas con discapacidad física e intelectual y prestan atención a colectivos vulnerables. La cita es inexcusable porque todos vamos a ser bienvenidos, todos acogidos e incluidos, y además de pasarlo bien estaremos colaborando en el sustento de una institución que reporta mucho bien a la sociedad cordobesa.