Relatos en verdeRafael del Campo

La media lagartijera

«Estocada medida, colocada en el mismo hoyo de las agujas…Y el toro patas arriba»

El toreo, el buen toreo se entiende, es un racimo de cosas muy simples : terrenos, distancias, temple…También naturalidad y ritmo y esa cosa imposible de explicar que nombramos, precisamente por eso, con una palabra que más que de sentido va cargada de poesía : sentimiento.

Pues sobre todas esas características tan valorables, el toreo debe tener, según yo me creo, medida. Medida en la ejecución de las suertes, en la gestualidad, en el metraje de las faenas . Medida.

Esto me hace recordar la media lagartijera : estocada medida, colocada en el mismo hoyo de las agujas…Y el toro patas arriba. O sea, una estocada “ esbozada “, en su sitio exacto y con su profundidad adecuada : ni más, ni menos. Una estocada perfecta, casi delicada, y sin el dramatismo ( a veces excesivo y salvaje ) de los estoconazos enteros.

Porque el toreo, según yo he mamado desde chico, no es cosa ni de atracones ni de excesos. Es otra cosa…es medida. Mayormente. Y en eso , como en otras tantas cosas, el toreo se parece a la vida, ese misterioso don que día a día toreamos con la exacta medida que nos marca la fe en nuestros principios.

Que , por cierto, menuda media lagartijera le ha clavado el electorado a un tal Pedro Sánchez….