La vuelta de agua potable al Norte es «cuestión de días»

La Diputación de Córdoba ha acogido este martes una nueva reunión del Comité de Sequía, encuentro encabezado por el presidente de la institución provincial, Salvador Fuentes, que se ha celebrado para abordar la situación generada tras las últimas lluvias, «con las que se ha modificado, sustancialmente, el volumen de los distintos embalses de la provincia desde los que se capta el agua para las ETAP desde las que Emproacsa abastece a los cordobeses», destacando que el agua potable volverá al Norte «en cuestión de días».

De este modo se ha explicado Salvador Fuentes, quien ha trasladado que «este Comité de Sequía ha acordado que la coherencia entre el Plan Especial de Sequía de la Confederación Hidrográfica y el presente Plan de Gestión de Riesgo por Sequía debe ser absoluta».

«Del mismo modo, la gestión de riesgos requiere la definición de escenarios de progresivo desabastecimiento y de los indicadores y umbrales que motivarán el paso de un escenario a otro y, por tanto, la puesta en marcha de medidas», ha apostillado Fuentes.

Para el máximo responsable de la Diputación y presidente de Emproacsa, «este plan nos permite supervisar periódicamente los niveles de embalse que tienen cada uno de los pantanos que afectan a la provincia, y, en base a eso, decretar los escenarios que hay que tener presentes en función de la disponibilidad de agua para su consumo».

En cuanto al escenario actual de cada uno de los pantanos, se ha decretado que el embalse de Iznájar continúa en situación de emergencia, pues se sitúa al 25% de su capacidad con 230 hectómetros cúbicos. Para salir de emergencia tendría que acumular 251 y para pasar a la normalidad harían falta 512.

El embalse de Martín Gonzalo pasa a situación de normalidad, ya que acumula 14,69 hectómetros cúbicos y está al 71% de su capacidad, mientras que el embalse de Sierra Boyera sale de la situación de emergencia y pasa a alerta, pues acumula 28 hectómetros cúbicos y está al 72%. Finalmente, el embalse de Puente Nuevo está al 29% de su capacidad con 82 hectómetros cúbicos.

Fuentes ha insistido en que «cada una de estas especificaciones serán trasladadas a las áreas de influencia de cada uno de los embalses, desgranando las recomendaciones que requieren cada una de las situaciones e insistiendo en la necesidad de realizar un uso y consumo responsable del agua a todos los niveles, con independencia del agua embalsada tras las lluvias».

Aunque «el escenario ha cambiado de manera significativa tras la Semana Santa, no nadamos en la abundancia por lo que se hace necesario insistir en que hay que ser cautos y responsables en el consumo», ha remarcado.

Zona Norte

Respecto a la situación de la zona norte, el presidente de la Diputación ha afirmado que «es cuestión de días el devolver la normalidad en el consumo de agua potable que afecta a más de 80.000 vecinos», pues «las lluvias aceleran el proceso de normalización».

Según ha expresado, «se están realizando analíticas diarias para determinar el estado de las aguas, un hecho que, el lunes, se puso en conocimiento de la Junta de Andalucía para que cuando tengamos las conclusiones de los análisis realizados, el protocolo de actuación certifique la garantía de las aguas y nos permita abrir los grifos».

«Se está actuando también en el Plan de Verificación del Comportamiento Hidráulico de la red, tenemos que verificar la calidad del agua para que cuando activemos las conducciones tengamos la certeza de que el agua llega en perfecto estado», ha dicho Fuentes.

En relación con las cinco obras programadas en la zona norte, el también presidente de Emproacsa ha asegurado que «en abril estarán prácticamente en funcionamiento. Ya tenemos ultrasonido en La Colada, desde hace 20 días y está concluido el informe de fugas que traslada que puede haber incidencias que serán resueltas de inmediato».

Fuentes ha mencionado, además, que «la nave ya está montada en Cuartanero y se van a instalar las máquinas esta semana, esto es el tratamiento de dióxido de cloro y estará funcionamiento en abril». En cuanto a la cubrición de depósitos en Sierra Boyera «se colocan la semana que viene, y nos quedaría, el tratamiento por flotación que se va a ultimar a finales de abril», ha detallado.

«Estas acciones suponen reforzar el mecanismo de potabilización de todas las aguas de la zona norte, y concluir la primera fase que nos propusimos. La segunda fase vamos a programarla en 2024, porque debemos seguir avanzando en las obras hidráulicas de la provincia de Córdoba. Vamos a intentar no perder tiempo en las obras para la provincia porque no se nos puede olvidar la sequía», ha concluido.

Escenarios de sequía

En lo que respecta a los escenarios de sequía, el de normalidad supone que situación en la que los indicadores muestran ausencia de escasez, mientras que la prealerta señala un inicio en la disminución de los recursos disponibles que puede suponer un riesgo, pudiéndose aplicar medidas.

El de alerta es un claro riesgo de incurrir en desabastecimiento y, además de las anteriores, se podrán aplicar medidas destinadas a la conservación y movilización del recurso, planteándose reducciones en los suministros. El emergencia es el máximo grado de afección por disminución de los disponibles y, además de las medidas que sean pertinentes entre las antes citadas, se podrán adoptar las medidas excepcionales y extraordinarias que puedan resultar de aplicación.

Así, en la zona de influencia del embalse de Martín Gonzalo (Montoro, Bujalance, Villafranca de Córdoba, Villa del Río, Cañete de las Torres, El Carpio, Adamuz y Pedro Abad), al entrar en situación de normalidad, recomienda a los ayuntamientos el mantenimiento, revisión y actualización del Plan de Gestión del Riesgo por Sequía y la preparación de las actuaciones y medidas para la eventual entrada en prealerta, entre otras.

En el escenario de alerta de Sierra Boyera y su zona de influencia (Los Blázquez, Peñarroya, Pozoblanco, Alcaracejos, Añora, Belalcázar, Bélmez, Cardeña, Dos Torres, Espiel, Fuente La Lancha, Fuente Obejuna, El Guijo, Hinojosa, Obejo, Pedroche, Santa Eufemia, Torrecampo, Villanueva de Córdoba, Villanueva del Duque, Villanueva del Rey, Villaralto, El Viso, Villaviciosa, Villaharta, Valsequillo y La Granjuela) se recomienda a los ayuntamientos para que prohíban el uso de agua potable para llenar piscinas y baldeos, reducción de riegos, emisión de bandos indicando a la población las restricciones y actuaciones para la reutilización de fuentes alternativas de suministro.

En cuanto a la situación de emergencia del embalse de Iznájar (Aguilar de la Frontera, Almodóvar, Baena, Benamejí, La Carlota, Castro del Río, Doña Mencía, Encinas Reales, Espejo, Fernán-Núñez (en parte), Fuente Carretero, Fuente Palmera, Guadalcázar, La Guijarrosa, Iznájar, Lucena --parte--, Luque, Montalbán, Montemayor, Montilla, Monturque, Moriles, Nueva Carteya, Palenciana, Posadas, Puente Genil, La Rambla, San Sebastián de los Ballesteros, Santaella, La Victora y Zuheros) se recomienda la emisión de bandos indicando posibles restricciones, prohibición general de llenado de piscinas, riegos, uso de fuentes ornamentales y baldeos, informar a ciudadanos y sensibilizar y fomentar medidas de ahorro.