El obispo anuncia que «en unos meses» se conocerá el nombre de su sucesor

La petición del obispo, Demetrio Fernández, al Papa del nombramiento de un coadjutor ya ha tenido respuesta. Es afirmativa, lo que acelera el nombramiento del sucesor del actual prelado, ya que el nuevo vendrá como coadjutor y será residencial cuando, una vez cumplidos los 75 años, el actual obispo presente la renuncia y le sea aceptada.

Estas declaraciones las ha realizado en el transcurso de una entrevista en COPE Córdoba, donde ha afirmado que esta medida «no adelanta mi jubilación, adelanta la venida del sucesor, que en vez de venir un año o dos después de yo pedir la renuncia, el Papa me mandará una ayuda antes de que presente la renuncia».

Sobre los plazos, monseñor Demetrio Fernández ha explicado que «es probable que dentro de unos meses en Córdoba seamos dos obispos: el residencial, que es un servidor hasta que el Papa me acepte la renuncia, y el obispo coadjutor o ayudante» y en este tiempo «estaremos juntos y bien avenidos».

Demetrio Fernández, que el próximo 15 de febrero cumple 74 años, reconoce estar bien de salud, aunque «según van pasando los años vienen achaques, falta de movilidad, falta de reflejos, fatiga; lo normal: no somos de goma».

Donde más nota esta situación es en el transcurso de su recorrido por la Diócesis, donde actualmente realiza la segunda Visita Pastoral. «A mis años eso ya pesa. Si viene el ayudante o coadjutor que haga esa tarea de patear la Diócesis y de esta manera la Diócesis no conoce colapso ni languideces, sino que estamos en marcha porque hay mucho que hacer», ha concluido.