Chesterton o la maravilla de existir y dar gracias por ello
Culminan las XIV Jornadas de Católicos y Vida Pública en Córdoba organizadas por la ACdP y dedicadas a la obra e influencia del escritor católico británico
Este jueves se ha celebrado la segunda y último tarde de las XIV Jornadas Católicos y Vida Pública de Córdoba, que durante dos días han reunido a destacados ponentes en el Centro Cultural José Luis García Palacios para reflexionar sobre la figura y el legado de G.K. Chesterton. El programa de esta segunda jornada, rico en contenido, ofreció una variedad de perspectivas sobre la obra del célebre escritor inglés, cuya relevancia sigue vigente en la actualidad.
La jornada comenzó con la conferencia «El pasto es verde. Chesterton contra la postmodernidad», impartida por José María Contreras Espuny, doctor en Filología Hispánica. En su intervención, Contreras destacó cómo el «maravillamiento» que Chesterton sentía por el mundo le llevaba inevitablemente a la gratitud. «Hacerse católico fue para él una manera de agradecer la maravilla de existir», afirmó. Esta perspectiva, profundamente humana y espiritual, permitió al público redescubrir la relación entre la fe y la vida cotidiana desde la mirada chestertoniana.
A continuación, la mesa-diálogo titulada «Chesterton, una apologética para el siglo XXI» ofreció un espacio para la reflexión colectiva sobre la influencia de Chesterton. En ella participaron Adolfo Ariza Ariza, delegado diocesano de Catequesis y doctor en Teología Catequética; Bernd Dietz Guerrero, catedrático de Filología Inglesa en la Universidad de Córdoba; y Antonio Muñoz García, socio del Centro de la ACdP de Córdoba.
Dietz, desde su experiencia como filólogo, abordó la faceta más literaria de Chesterton, describiéndolo como un polemista que, pese a estar «contra la doxa», «casi no se peleó con nadie». También subrayó su peso en autores como Marshall McLuhan y figuras históricas como Gandhi, quienes reconocieron públicamente su influencia. Habló de la vastedad de su obra, que abarca 48 volúmenes, y destacó El hombre eterno como su mejor libro. Asimismo, recomendó a los asistentes la lectura de ¿Por qué soy católico?, señalando que Chesterton está siendo mejor traducido al español en la actualidad.
Por su parte, Adolfo Ariza ofreció un enfoque teológico, presentando «siete ideas o sacramentos chestertonianos». Entre sus planteamientos, destacó el rechazo al estatismo, la afirmación de que lo genuinamente católico «es estar en el mundo, no ser del mundo» y una concepción de la revolución como una reforma continua. Su intervención culminó con una emotiva cita de El hombre eterno, subrayando la capacidad de Chesterton para abordar temas de gran profundidad con sencillez y claridad.
Fernando Cruz Conde, consiliario del Centro de la ACdP de Córdoba, fue el encargado de clausurar unas jornadas que describió como «un buen empujón de esperanza en el comienzo del año jubilar». Domingo Suárez, secretario provincial de la ACdP, aprovechó la ocasión para anunciar que Córdoba será la sede de las jornadas nacionales en 2026, coincidiendo con el vigésimo aniversario de la primera edición de este encuentro.
Las jornadas finalizaron con la celebración de la Santa Misa en la iglesia de Nuestra Señora de la Merced, presidida por don Fernando Cruz Conde.
Con esta edición, las Jornadas Católicos y Vida Pública han confirmado su importancia como foro de pensamiento y encuentro, un espacio que año tras año revitaliza el compromiso de los laicos en la evangelización y el diálogo público desde la fe.