La delegada de Salud, María Jesús Botella, en la reunión anual convocada por el Equipo Provincial de Atención Temprana
El Servicio de Atención Infantil Temprana de la provincia ha atendido a 1.150 menores en 2024
Datos revelados en la reunión anual de los profesionales del servicio, que tratan los trastornos en el desarrollo de la población entre 0 a 6 años
La delegada de Salud y Consumo, María Jesús Botella, ha presidido la reunión anual de coordinación convocada por el Equipo Provincial de Atención Temprana, que integra a todos los profesionales de salud, educación y servicios sociales que atienden a la población infantil entre 0 y 6 años para prevenir o tratar trastornos del desarrollo. Las jornadas han congregado a profesionales de todos los centros de Atención e Intervención Temprana (CAIT) y de la Unidad de Seguimiento y Neurodesarrollo de la provincia.
Botella ha puesto de manifiesto la importancia de «este servicio público sociosanitario de la Administración autonómica, que permite, en todo el territorio de la provincia de Córdoba, que los niños y niñas que lo necesiten tengan realmente una posibilidad de ser atendidos». En este sentido, ha aludido a la responsabilidad de los adultos de proteger a la infancia, por su vulnerabilidad, y ayudarles en algo tan necesario como es «su capacidad de desarrollo máximo para poder adquirir una autonomía lo más plena posible».
«Estamos hablando de un volumen importante», ha explicado Botella. Desde diciembre de 2023 hasta diciembre de este año, la Unidad de Seguimiento y Neurodesarrollo de la provincia de Córdoba ha atendido a 1.150 menores, y de los 1.070 menores que han sido valorados, el 83 por ciento, es decir, 888, han sido derivados a uno de 22 CAIT de Córdoba, 8 en la capital y 14 en la provincia, que en total atienden a unos 3.381 menores, según los últimos datos.
En estas reuniones en las que se pone en conocimiento de los CAIT los procedimientos actualizados y la información relevante, Botella ha puesto el foco en la mejora continua de «los protocolos de coordinación desde que se detecta una posible necesidad de atención temprana por los servicios de pediatría de atención primaria, hospitalaria o por parte de la unidad de neonatología».
Funcionamiento del protocolo
Son los profesionales del Equipo de Pediatría de Atención Primaria y del hospital, así como de la Unidad de Neonatología, los encargados de iniciar el procedimiento, ante cualquier señal de alerta que observe durante las revisiones de los menores. En caso necesario, los niños y niñas afectados serán derivados a una de las Unidades de Seguimiento y Neurodesarrollo, que son el primer nivel de ayuda especializada ante los indicios de este tipo trastornos.
Un experto del equipo de profesionales se encargará de valorar las necesidades de la población infantil sobre la base de un diagnóstico funcional y del resultado el estudio se decidirá la idoneidad o no de la intervención y, en su caso, la derivación a uno de los CAIT.
La Atención Temprana está dirigida a quienes que presentan los siguientes trastornos del desarrollo, como trastornos del desarrollo cognitivo, del desarrollo del lenguaje, de la expresión somática, emocionales, de la regulación y el comportamiento y de la relación y la comunicación. En estos centros se diseñan actividades integrales, que involucran a profesionales, menores y sus familias. En el equipo básico de profesionales de los Centros de Atención e Intervención Temprana podemos encontrar especialistas de las áreas de psicología, logopedia y fisioterapia.