La evolución de las Torres Colón a lo largo de la historia

Madrid

Las Torres Colón, un edificio de consumo medioambiental casi nulo en el centro de Madrid

A finales de 2022 concluyen las obras de remodelación de este edificio, que pierde su característico enchufe pero gana en sostenibilidad y modernidad

Las antiguas Torres Colón han sido la imagen y representación del progreso en la ciudad de Madrid. Desde su inauguración en 1976, las dos estructuras gemelas han formado parte del skyline de Madrid y su corona verde art decó, más conocida como el enchufe, han sido su seña de identidad desde entonces. En 2020 comenzó la remodelación de las torres, cuya obra finalizará a finales de este 2022, cuando podremos ver su nuevo aspecto.

La intención de Mutua Madrileña, propietaria de las torres, ha sido y es convertir este edificio en el más moderno y sostenible de Madrid. Innovación, diseño y sostenibilidad son los puntos fuertes de este proyecto de rehabilitación, que una vez finalizado, ofrecerá un atractivo más para que nuevas empresas se instalen en la ciudad.

Las Torres Colón, el edificio más sostenible de MadridMutua Madrileña

Un 60 % menos de consumo energético

Una parte del proyecto es la instalación de energías renovables y otros equipos de última generación que aumentarán su eficiencia energética y sostenibilidad, convirtiéndose así en el primer edificio de oficinas de consumo casi nulo de Madrid. Con este proyecto, el edificio pasará a consumir un 60 % menos de energía que un edificio convencional, reduciendo así las emisiones de CO2. La instalación de energías renovables que se llevará a cabo en el edificio le permitirá a este generar el 10 % de la energía que consuma.

El edificio contará con un sistema de trigeneración, que servirá para producir agua fría destinada al funcionamiento de las instalaciones de climatización, y permitirá también la generación de electricidad para el autoconsumo del edificio. Además, se devolverá a la red eléctrica el excedente de producción de energía eléctrica de fuentes renovables que no se consuma.

Según indica la firma aseguradora, el nuevo edificio también dispondrá de la certificación Well, centrada en valorar la salud y el confort de los usuarios de los edificios. Para obtener esta certificación el proyecto contempla la implementación de las mejores prácticas en diseño y construcción. Entre ellas figuran la calidad del aire, la ventilación natural, el tratamiento del agua, la calidad de la iluminación y uso de la iluminación natural, el confort térmico, la absorción del ruido, la gestión de residuos y la reducción de emisiones.

Las nuevas Torres Colón se inaugurarán a finales de 2022Mutua Madrileña

El requerir un nivel muy bajo de energía y generar parte de la energía para autoconsumo, unido al aislamiento de la fachada, favorecerá que las torres tengan un comportamiento ambiental elevado, y un nivel de eficiencia energética muy alto, características que permitirán al edificio ser catalogado como de consumo casi nulo.

Diseño innovador

En la última imagen que tenemos del edificio resaltaban los colores ámbar y el característico verde del revestimiento superior, más conocido como «el enchufe», por los dos copetes. Sin embargo, ha sido retirado para el  nuevo proyecto, y dará lugar a cuatro nuevas plantas de oficinas. «La verdad que es una pena, son historia de la ciudad, pero hoy en día todo cambia muy rápido», comenta Teresa, vecina del barrio, mientras compra, como cada día, el periódico en el quiosco de la plaza de Colón.

Futuro aspecto exterior de la fachada del inmuebleMutua Madrileña

El edificio destaca por su estructura suspendida o colgante, diseño innovador en el momento de la construcción de estas torres. La remodelación mantendrá la estructura suspendida original íntegramente, modificando únicamente el diseño y arquitectura exteriores de forma que se adapte a las necesidades actuales.

Se conservará la altura original de 117 metros, así como la superficie total actual, de 20.298 m2. Las entradas de acceso y a las zonas comunes a pie de calle también serán actualizadas con esta transformación. La renovación permitirá ganar espacio y por tanto comodidad para los viandantes.

El nuevo diseño, encargado al estudio de arquitectura madrileño Luis Vidal + Arquitectos, cuenta con el visto bueno de la Comisión para la Protección del Patrimonio Histórico-Artístico y Natural (CPPHAN) del Ayuntamiento de Madrid. Esta remodelación será la tercera a la que se somete el edificio en sus 50 años de historia.

El inicio de las obras de las Torres Colón y su aspecto antes de la última reforma

Un edificio con mucha historia

Las construcción de estas torres fue muy polémica. Comenzaron en 1967 pero fue tres años más tarde cuando el Ayuntamiento de Madrid dio orden de «demolición de las obras abusivas», ya que se habían excedido en dos plantas y debían recortarlas nueve metros. En un principio el edificio iba a estar destinado a viviendas de lujo de más de 400 metros cuadrados, pero tras un pleito contra el promotor, el Ayuntamiento le tuvo que pagar una indemnización tan alta, que permitió que modificara el uso de residencial a terciario. De esta forma, las torres albergaron oficinas, lo que era más rentable. 

Aspecto de las Torres Colón después de su inauguraciónEstudio Lamela

Por este motivo las obras estuvieron más de tres años paralizadas, pero finalmente se reanudaron para inaugurar las Torres Colón en 1976. En un principio, eran dos torres claramente diferenciadas, pero en 1989, por una nueva normativa, era necesario instalar una escalera de emergencia, ya que el edificio carecía de ella. El Estudio Lamela, encargado de la construcción inicial, tuvo que pensar en una solución, y decidió construirla al aire libre entre las dos torres. Entre las dos cubiertas se instaló un remate central, que a partir de entonces fue común para ambas torres, que será conocido como el controvertido «enchufe» art déco, con el fin de esconder las antenas y demás maquinaría que se le había ido instalando al edificio.

Imagen de las obras de las Torres ColónEstudio Lamela

El enchufe se convirtió con el paso del tiempo en la seña característica principal del edificio y los madrileños se acabaron acostumbrando. Hoy en día, pocos se imaginan un aspecto diferente. «No me lo imagino. Llevo muchos años viéndolas todos los días y me parecían bonitas. Es una pena lo del enchufe, pero todo cambia», indica Joaquín Álvarez, que trabaja en unas oficinas muy cercanas. La nueva imagen va a cambiar la fisonomía de toda la Plaza de Colón, debido al fuerte impacto visual de las nuevas torres. 

Obras de las Torres ColónEstudio Lamela

Polémica por la última reforma

La última remodelación de las Torres Colón, que cambia por completo el aspecto del edificio, provocó que Carlos Lamela, presidente ejecutivo de Estudio Lamela e hijo de Antonio Lamela, arquitecto de las torres, pidiera que se protegieran antes de la reforma. Mantiene que dejaría el edificio tal y como lo proyectó su padre en 1976 y acusa a Mutua de especulación por la última remodelación. El Ayuntamiento, por su parte, se posicionó del lado de Mutua y ha mostrado siempre su apoyo al nuevo proyecto que, según el Estudio Lamela no respeta el proyecto inicial.