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Ayuntamiento de Madrid  Muere un bombero en el barrio de Moratalaz tras ser arrollado por un coche que se dio a la fuga

El suceso tuvo lugar la noche del lunes 25 de julio, en el barrio de Moratalaz. El conductor arrolló a la víctima que iba en bicicleta y huyó

Una marcha ciclista y una concentración recordarán este miércoles al bombero del Ayuntamiento de Madrid que falleció ayer tras ser arrollado por un coche mientras circulaba en BiciMad por Moratalaz.

Así lo ha trasladado en sus redes sociales la asociación convocante, Pedalibre, que ha llamado a encontrarse primero, a las 19.30 horas, en Manuel Becerra, donde está la estación donde trabajaba el fallecido.

Posteriormente se trasladarán hasta el camino de Vinateros con la calle Marroquina, lugar del suceso. El cuerpo ha trasladado a través de Twitter su agradecimiento por la iniciativa.

El suceso tuvo lugar en la noche del lunes, cuando un conductor arrolló al bombero de 45 años para después darse a la fuga. Tras ser trasladado al Hospital de la Paz en estado grave acabó falleciendo. El conductor de 32 años, se entregó este martes en la comisaría de Moratalaz.

Alberto, era voluntario de un grupo de rescate de animales de Madrid y decidió ayudar a sus compañeros que habían recibido un aviso para rescatar a un felino atrapado en una bajante. Para desplazarse hasta el lugar de los hechos, usó una bicicleta del Ayuntamiento (BiciMAD) ya que no disponía de coche.

Concentración y marcha ciclista

El miembro de Pedalibre, Fernando García ha explicado a Europa Press que en general para poder garantizar la seguridad de los ciclistas una de las claves es que «haya un gran número de ellos» porque está «comprobado académicamente» que a mayor número de personas que optan por este medio hay menos sucesos como el ocurrido ayer.

También ha apuntado a la necesidad de que haya una red ciclista que cubra toda la ciudad por las principales avenidas para fomentar la bicicleta, cosa que «en Madrid no pasa».

Para García, además, otra de las cuentas pendientes de la capital es la de establecer estrategias de Visión Cero, que nacieron en Suecia y que recoge un conjunto de medidas para garantizar que no haya muertes ni accidentes en las vías.

Contempla, por ejemplo, que los pasos de peatones o carriles bici en intersecciones sean elevados para que así los coches para cruzarlos tengan que reducir la velocidad y con ellos reducir la mortalidad de los ciclistas.