Así funcionará la nueva unidad antigrafitis de Madrid: formación de policías e investigación de grafología

El Ayuntamiento de Madrid pondrá en marcha de forma «inminente» una nueva sección de Policía Municipal. Estas patrullas serán las encargadas de luchar contra las pintadas vandálicas que ensucian la capital. La nueva iniciativa persigue la disminución o eliminación de los grafitis a través de agentes especializados y formados en la materia que, no sólo impidan el acto en sí, sino que investiguen quién está detrás.

El consistorio dirigido por José Luis Martínez-Almeida asegura que se han dado todos los pasos «en tiempo récord» para que esta sección de la Policía Municipal se ponga en marcha. Estas patrullas recibirán el nombre de Sección de Protección del Patrimonio Urbano. En un principio se dedicarán unos 40 efectivos, divididos en turnos de mañana, tarde y noche. El proyecto supondrá la creación inmediata de estas unidades especializadas que perseguirán y sancionarán con la colaboración del Área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad y su refuerzo del servicio de limpieza municipal para eliminar estos grafitis.

Con la implantación de estas patrullas especializadas se pretende dar cobertura a uno de los ataques más frecuentes al mobiliario urbano y a los inmuebles pertenecientes a los negocios madrileños. Además, tal y como apuntan fuentes del consistorio a El Debate, supondrá una mejora de la actuación al contar con agentes con formación continua en esta materia que sean capaces de actuar en el momento en el que se comete la pintada y, además, investigar el tipo de firmas e, incluso, la grafología de las pintadas.

De esta manera, las patrullas antigrafiti estarán dotadas de las herramientas necesarias para denunciar las pintadas y coordinarse con los servicios encargados de la limpieza para que las pintadas desaparezcan lo antes posible. Además, al contar con independencia se permitirá agilizar los trámites a través de la Comisaria Judicial.

Multas de hasta 6.000 €

La ordenanza de limpieza de Madrid aprobada hace un año implantó severas multas para aquellas personas que pinten las paredes de la capital. Concretamente estas sanciones tendrán un mínimo importe de 2.000 euros hasta los 3.000 euros.

Además, el Consistorio tiene en su ordenanza multas más elevadas para aquellos reincidentes. Concretamente, de entre 4.000 y 6.000 euros.