El árbol que mató a la joven en Madrid se revisó dos veces en un año y no tenía patologías ni defectos

Este jueves, una joven de 23 años fallecía en Madrid después de que un árbol se desplomase en la calle Almagro mientras cruzaba un paso de cebra con sus padres. Los servicios de emergencias se trasladaron al lugar, pero únicamente pudieron certificar su muerte.

El árbol, tal y como informa el Ayuntamiento de Madrid, era un olmo siberiano con un perímetro de 188 centímetros que había pasado dos revisiones por el Servicio de Evaluación y Revisión Verde (Server), una en mayo del 2022 y otra en mayo de este año. Este chequeo se había realizado en dos ocasiones en un año por su gran envergadura. Sin embargo, el informe concluyó que se trataba de un árbol sano que no tenía ningún defecto.

A pesar de ello, las rachas, que superaron los 80 km/ h en el área metropolitana vencieron al ejemplar que terminó caído provocando el accidente fatal. El Server constató, de nuevo, durante el día de ayer que no sufría ninguna patología ni daño previo al vuelco.

El Server se puso en marcha en septiembre de 2018 y realiza, desde entonces, un programa de inspecciones sistemáticas, ordenadas, periódicas y programadas para los 21 distritos.

Los ejemplares a inspeccionar son los de edad madura y vieja. En la actualidad, el Server controla 350.000 ejemplares. El árbol caído este jueves estaba incluido en esta cifra y, por ello, se sometía a las revisiones pertinentes.

Un accidente fatal

Los hechos ocurrieron este jueves sobre las 13 horas a la altura del número 2 de la calle Almagro, junto a un parque. El ejemplar se vino abajo matando a la joven de 23 años e hiriendo a otras seis personas.

El árbol precipitó en medio de la calle, muy cerca de la confluencia con la avenida de Santa Engracia. Los bomberos de Madrid acudieron a la zona para cortarlo y retirarlo. También agentes de la Policía Nacional y Municipal, estuvieron presentes para cortar el tráfico en la zona.