Exterior del centro penitenciario de Alcalá-Meco, en MadridEuropa Press/Cézaro De Luca

La reconstrucción paso a paso de la fuga del sicario de Alcalá Meco

La fuga del joven de 21 años se debe a un «fallo de seguridad extremadamente grave» derivado de una serie de descuidos del personal que trabaja en el centro penitenciario de Alcalá Meco

El pasado sábado 23 de diciembre Yusef M. L, conocido como 'El Pastilla', se fugó de la cárcel madrileña de Alcalá Meco aprovechando las visitas navideñas de los familiares de los presos.

La víspera de Nochebuena, el reo –condenado por el asesinato de Nayim K. A., alias 'Tayena', jefe de una de las facciones del crimen organizado en Cádiz– se encontraba en el Módulo II de la conocida prisión madrileña cuando cuatro familiares acudieron al centro penitenciario para visitarlo.

Celdas de la prisión de Alcalá Meco

Tras un primer encuentro grupal a través del locutorio, al fugado de 21 años se le concedió un vis a vis con uno de sus familiares. Al finalizar el encuentro sin intermediarios 'El Pastilla' consiguió infiltrarse entre los familiares, orquestando así una de las fugas más llamativas de los últimos años en nuestro país.

En presencia de sus familiares, que no detuvieron al preso, Yusef se coló entre once visitantes y consiguió pasar el primer control de acceso de la cárcel mientras los funcionarios de prisiones entregaban la documentación a los familiares. Su modus operandi consistió en salir junto a un trabajador del centro penitenciario por una pequeña puerta situada al lado del control de documentación.

Tras violar el primer control de la cárcel, otra negligencia de seguridad propició un paso más en la fuga de 'El Pastilla'. El sicario encontró una segunda puerta, que debía estar cerrada, burlando así el segundo control sin llamar la atención de los trabajadores de prisión.

La Guardia Civil no le reconoció

Después de sobrepasar estos controles, el preso llegó a la salida principal, última barrera para el joven que tan solo llevaba un mes internado en prisión. La Guardia Civil, que se encontraba en esta zona del control, no reconoció al sicario, al que confundió con un familiar más. La Benemérita se limitó a indicarle la salida de familiares y propició así la huida de 'El Pastilla', que, presumiblemente, escapó después en el coche de algún familiar.

La fuga del joven sicario se debe a un «fallo de seguridad extremadamente grave» derivado de una serie de descuidos del personal que trabaja en el centro penitenciario de Alcalá Meco. Aunque no se ha abierto un procedimiento penal contra ninguna persona en concreto, la Guardia Civil ha iniciado ya una investigación para dilucidar los hechos y depurar responsabilidades. Asimismo, se está priorizando encontrar al sicario fugado para devolverlo a la prisión.