Inmigrantes en Alcalá de Henares

La pasividad del Gobierno de Sánchez ante la crisis de inmigrantes en Alcalá y Barajas: «Han expulsado a 21 del centro»

El Ejecutivo de la Comunidad de Madrid se queja de la falta de información acerca de esta crisis que afecta a la capital

La crisis migratoria continúa en Madrid. Tanto Alcalá de Henares como el Aeropuerto de Barajas se han convertido en centros de acogida que dan cobijo a estas personas de origen africano. Desde la llegada de estos 1.300 inmigrantes de origen subsahariano al cuartel Primo de Rivera, la inseguridad ha aumentado en el histórico municipio.

Los vecinos ya se han quejado al Gobierno central que no ha puesto en marcha ninguna medida al respecto. «Esta zona era muy buena, pero ahora viendo este tipo de gente, nos provoca mucha inseguridad. Cuando anochece a mí me da miedo ir sola por la calle», subraya una vecina.

La Red Española de Inmigración y Ayuda al Refugiado ha presentado este miércoles una denuncia ante la Audiencia Nacional por la expulsión «sin fundamentación ni resolución por parte de la Secretaría de Estado de Migraciones» de más de 21 inmigrantes.

La plataforma explica que este centro en particular acoge a 1.300 personas que han llegado a España en 2023 y que vienen derivados de regiones con mucha presión de inmigración irregular como Canarias.

Ante esta situación, el Gobierno de Sánchez únicamente se ha limitado a negar las palabras de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, acerca de las presuntas agresiones.

El encargado fue el delegado del Gobierno, Francisco Martín, quién comentó que «no se habían producido agresiones en Alcalá de Henares». Horas más tarde la policía desmentía sus palabras ya que «hubo dos llamadas el 11 de diciembre», tal y como indica un acta de denuncia.

En dicho informe se recoge que el agresor era «un joven de raza negra, vestido de negro que cambió de sudadera a una verde e iba con mochila negra». Además, se añade que ha habido dos intervenciones con dos afectadas con incidencias algo similares con personas diferentes».

La actuación del Gobierno de Sánchez no solo se queda ahí, también acusaron a la presidenta Ayuso de racista, además de «iniciar una escalada por ver quién es más racista entre la derecha ultra y la ultraderecha».

En este sentido, se preguntaba «¿Cuál es el siguiente paso? En esta escalada, ¿Dónde va a ir la presidenta de la Comunidad de Madrid para ser más racista que Vox? Me preocupa muchísimo».

Parsimonia en Barajas

La situación tampoco ha cambiado en Barajas. En el aeropuerto continúan acinados 366 inmigrantes, tal y como indican desde el Sindicato Unificado de la Policía (SUP). Desde el cuerpo nos explican que «las medidas del Gobierno son insuficientes».

Los agentes han solicitado el servicio de limpieza porque una de las salas no tiene duchas, pero «Cruz Roja no asiste», explican desde el SUP. En este sentido, apuntan que en otro sala mandaron hacer una desinfección profunda y «lo que han enviado es a dos limpiadoras con lejía cuando hay cucarachas, chinches...».

El Gobierno madrileño indica que a través de Barajas llegan cientos de menores. Frente a los 77 menores al mes que entraban por el aeropuerto el año pasado, se estima que en lo que llevamos de 2024 esta cifra se ha elevado a 400.

El desinterés que muestra el Gobierno central se refleja en la carta que ha enviado el secretario general de la Red Española de Inmigración, Rafael Escudero, a la presidenta Ayuso. En ella le traslada su preocupación y le informa de «las graves situaciones que se están dando en el centro de Alcalá».

«En dicho centro se ha dado un maltrato continuado a las personas usuarias que ha motivado que la organización en nombre de la que te escribo haya interpuesto tres denuncias ante el Defensor del Pueblo, por ahora sin éxito alguno», ha indicado Escudero.

La crisis migratoria continúa azotando a la capital y no se espera que mejore por momentos. Los vecinos complutenses no paran de quejarse ante este suceso que azota a la ciudad.