La reacción de Rocío Monasterio a los insultos de los ultras de extrema izquierda del Rayo Vallecano

La portavoz del grupo parlamentario de Vox en la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio, acudió este domingo al estadio del Rayo Vallecano que se enfrentaba al Real Madrid. En un momento del encuentro, los ultras de extrema izquierda del equipo municipal, los Bukaneros, empezaron a insultar a la líder del partido de Abascal en la región.

«Monasterio hija ..., Bukaneros te saludo», gritaron al unísono estos aficionados radicales. La reacción de la política fue al instante, lo que provocó que la confrontación fuese a más.

La portavoz madrileña mando callar entre risas y a posteriori hizo un trend que se ha hecho viral de marcarse la mandíbula. A Rocío Monasterio le acompañó al estadio su marido, Iván Espinosa de los Montero.

La líder de Vox en Madrid mantiene una estrecha relación con el presidente del Rayo Vallecano, Martín Presa, y es una aficionada más que suele acudir a animar al equipo municipal.

Además, en su cuenta de Twitter también reaccionó e indicó «¡Son Adorables!» acompañado de un emoji de sarcasmo. En este sentido, publicó otro post de una imagen de ella misma sobre el césped que decía «El Rayo se queda en Vallecas», haciendo alusión a la polémica sobre su traslado.

Posible cambio de ubicación

Este año el club vallecano cumple cien años y lo hace en plena polémica por un posible traslado de la instalación. La junta directiva del club y la propietaria del campo, la Comunidad de Madrid, llevan semanas conversando.

La clave está en saber dónde podría ubicarse el nuevo estadio. Los vecinos no quieren oír hablar de la marcha del campo ya que es un icono de la zona. El presidente del Rayo, Martín Presa, señalaba que lo quieren «lo más cercano posible».

La presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, fue quien anunció esta noticia e indicó que «desde el Rayo ya han visto una serie de terrenos y en breves» entrarán en negociaciones. La idea es ceder terrenos y que el club costee el nuevo estadio.

Martín Presa señalaba este lunes que el estadio «se ha quedado pequeño y no cumple las condiciones de modernidad que exigen la Liga y las competiciones europeas». Asimismo, dejaba claro el deseo del traslado: «El club no tiene capacidad para financiar una reforma, pero sí un nuevo estadio».

El talón de Aquiles de este centro es que no puede hacerse más grande porque está limitado por los edificios de alrededor. A diferencia del Bernabéu, el estadio de Vallecas tiene las casas casi pegadas. «Hace falta una ampliación grande de capacidad», remarcaba Martín Presa.

La Comunidad de Madrid es la propietaria del suelo y del campo del Rayo, al que se lo cede mediante un convenio por el que el club le abona cada año una cantidad que ahora ronda los 81.000 euros.

Una duda que ha surgido a todo el mundo es dónde se ubicará el nuevo estadio. Por el momento son todo especulaciones ya que ni la Comunidad ni el club apuntan aún posibles ubicaciones.

Si se tiene en cuenta las palabras del presidente del Rayo de que se quieren ir a un lugar lo más cerca posible, todo apunta a que se irán al Ensanche de Vallecas como opción más segura, y a parcelas concretas, como las situadas junto al Hospital Infanta Leonor.