Madrid se planta ante el «cupo catalán»: «No podemos permitir peajes ni chantajes de los independentistas»

El Gobierno catalán, con Pere Aragonès, de momento, a la cabeza, está dando pasos hacia un nuevo modelo de financiación «singular» y «propio» en el que contempla que la Generalitat recaude y gestione todos los impuestos, es decir, una suerte de «cupo catalán». Algo a lo que se niega en rotundo la Comunidad de Madrid, que se decanta por un sistema de financiación «abordado de forma multilateral por todas las comunidades autónomas», que sea «justo» y, sobre todo, en el que no haya que pagar «peajes» ni «chantajes» a los independentistas catalanes y «mucho menos» a prófugos de la Justicia.

Miguel Ángel García, el portavoz del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso, se mostraba este miércoles radicalmente en contra de los planes de la Generalitat. «Lo venimos denunciando desde hace muchísimo tiempo, en Madrid queremos un modelo de financiación para todas las comunidades autónomas que se negocie de forma multilateral en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera», señalaba el número dos del Ejecutivo madrileño.

Además, García recordaba que la Comunidad de Madrid es «la región que más aporta a la caja común con la que se financian los servicios públicos de nuestra región y de otras comunidades autónomas». En concreto, la Comunidad de Madrid aportó en el año 2021 un total de 4.619 millones de euros al Fondo de Garantía del sistema de financiación autonómica, siendo la comunidad que más aportó, seguida de Cataluña, que aportó 1.697 millones, es decir, casi 3.000 millones menos. Además, si se suma la aportación de Madrid al Fondo de Suficiencia Global, esta cifra ascendería a 846 millones de euros más.

Los planes de Aragonès

Apenas un día después de que la Generalitat presentara una propuesta para gestionar el 100 % de los impuestos que se recaudan en Cataluña, frente al 9 % actual, a cambio de una cuota de solidaridad interterritorial, Aragonès ha precisado, durante un desayuno informativo de Europa Press en Madrid celebrado este miércoles, que esta aportación sería «temporal» mientras el Estado «adelgaza» su estructura para acomodarse a la llegada de un menor número de recursos.

Aragonès ha explicado que la contribución que realizará Cataluña al fondo de solidaridad interterritorial será «fijada bilateralmente» con el Gobierno central, «sometida a unos objetivos y limitada en el tiempo». En cuanto a los objetivos a cumplir, ha aclarado que estarían «relacionados con el grado de desarrollo económico, con el objetivo de aumentar la capacidad fiscal de todos los territorios y relacionados con los objetivos de consolidación de las cuentas públicas».