Pedro Sánchez en su visita a las criptas del Valle de los CaídosFernando Calvo

Las chapuzas de las exhumaciones en el Valle de los Caídos: «Hay casos de un cuerpo repartido en tres lugares diferentes»

El Valle de los Caídos vuelve a estar en el punto de mira debido a la visita exprés de Pedro Sánchez a las criptas del conjunto monumental donde hace meses se estaban llevando a cabo las exhumaciones de varios restos mortales. El Gobierno central quiere convertir este lugar en un centro de interpretación y, además, expulsar a los monjes benedictinos que residen allí. Los trabajos de desentierro llevan ejecutándose desde hace años, hasta que en septiembre de 2023 la Justicia decidió paralizar estas actuaciones por incidencias en las licencias de obra. En el conjunto monumental se enterraron a 33.847 personas, de las cuales, 12.510 no han sido todavía identificadas.

Fuentes cercanas a Patrimonio Nacional y a la Asociación en Defensa del Valle han explicado a El Debate que hace años se hicieron «auténticas chapuzas» con estos restos de las víctimas de la Guerra Civil. Uno de los casos fue el de los 133 navarros que fueron entregados a sus familias durante el Gobierno de Felipe González.

Estas fuentes relatan que Patrimonio Nacional, entidad que pertenece a Presidencia del Gobierno, no estudió si esos restos pertenecían a esas personas. «Se entregaron a las familias y pueden ser perfectamente de personas que eran de Madrid. Además, hay una segunda lectura, hay familiares de la capital que piden que se exhumen los restos de sus familiares y en verdad están en Navarra».

Este caso no queda ahí, «el fallo que tuvieron los forenses en aquella obra es que se confundieron de planta y mezclaron unos cuerpos con otros, de ahí que algunos restos de otras familias estén en los cementerios navarros. Aquello fue una auténtica vergüenza, sin ninguna duda», subrayan.

Otra «chapuza» que cometieron los operarios de Patrimonio Nacional fue en varios osarios del Valle de los Caídos, los lugares destinados para reunir los huesos de las víctimas de la Guerra. Personal de Patrimonio ha confesado a El Debate que «durante el Gobierno de Felipe González, a principios de los 90, abrieron estos espacios y se encontraron una amalgama de barro, cajas destruidas y restos mortales».

Cruz del Valle de los Caídos

El Ejecutivo socialista «mandó entonces construir unas cajas gigantes y cargaron con palas toda esta mezcla y los repartieron por diferentes lugares del Valle. Hay casos en los que un hombre puede estar en tres osarios diferentes del conjunto monumental», relatan estas fuentes.

También confiesan que en una ocasión Patrimonio Nacional decidió meter un aseo para los forenses en un lugar lleno de restos mortales. «Acudí al baño y fui a tirar de una trampilla y para mi asombro me cayó un cráneo y un fémur a mis pies. Los sorprendente es que la entidad del Estado pusiera ahí un baño a sabiendas de que era un lugar donde había partes de seres humanos», remarcan estas personas.

Hay que destacar que en el Valle de los Caídos descansan los restos de las víctimas de la Guerra Civil de ambos bandos. Hasta el momento, los trabajos han dado como resultado el hallazgo de la caja 198 y la exhumación de las 12 víctimas asesinadas en 1936 en Aldeaseca y en Fuente El Saúz, Ávila. Los restos de 11 de ellas fueron identificados genéticamente y entregados a sus familiares.

Francisco Franco promulgó el Decreto-Ley de 23 de agosto de 1957 por el que se creaba la Fundación de la Santa Cruz del Valle de los Caídos. En el preámbulo se recordaba que el «Monumento Nacional a los Caídos» había sido creado para «perpetuar la memoria de los que dieron la vida por Dios y por la Patria».

También se señalaba que «el sagrado deber de honrar a nuestros héroes y nuestros mártires ha de ir siempre acompañado del sentimiento de perdón que impone el mensaje evangélico» y que «además, los lustros de paz que han seguido a la Victoria han visto el desarrollo de una política guiada por el más elevado sentido de unidad y hermandad entre los españoles» por lo que «este ha de ser, en consecuencia, el Monumento a todos los Caídos, sobre cuyo sacrificio triunfen los brazos pacificadores de la Cruz».

Imagen del Valle de los Caídos

Situación deplorable del Valle

El Valle de los Caídos vive una situación crítica por la falta de atención de Patrimonio Nacional. En varias ocasiones se han quedado sin agua y sin luz por diferentes cortes en las instalaciones. Además, se le suman los desperfectos que el Gobierno de Sánchez no atiende.

Personas cercanas al entorno del Valle explican a El Debate que «las goteras y las humedades continúan y sus arreglos está completamente paralizados. Además, se le suma que las bóvedas caídas no se reparan. Desde el 2017 no se ha vuelto a hacer nada».

En este sentido, estas fuentes señalan que «Patrimonio Nacional lleva tres años sin aportar ni un euro a la Abadía para el cumplimiento de los fines fundamentales y, por tanto, es la propia institución del Valle de los Caídos quien está sufragando todos los gastos para que se siga manteniendo este monumento».

Humedades en el interior del Valle de los Caídos

En concreto, la entidad que está adscrita a Presidencia del Gobierno «retiró sus fondos desde el año 2021», así consta en las cuentas anuales de Patrimonio.

Otro problema con el que tiene que lidiar el Valle es el corte de luz que «no se hace a mala idea», defienden desde la entidad. «Más bien son averías de mayor envergadura por la situación en la que se encuentra el templo y esto demuestra dos cosas», subrayan las personas cercanas al Valle de los Caídos.

Desde el Valle indican que esta falta de atención se debe a un motivo fundamental: «Es un templo que el Gobierno quiere que se caiga y vaya perdiendo fuerza. Muestran un claro desinterés y lo que han hecho es politizarlo».

A este maltrato se le suma que Patrimonio Nacional lleva quince años impidiendo que los visitantes puedan acceder a la cruz del Valle por una obras inexistentes. «Tanto la fundación de la Santa Cruz y la entidad del Estado están perdiendo grandes beneficios porque no hay visitas».