Ayuntamiento de Madrid
Madrid ultima la nueva regulación de pisos turísticos: «Será equilibrada, pero, probablemente, no termine de contentar»
La alcaldesa en funciones de Madrid ha avanzado en una entrevista con El Debate que la normativa verá la luz en las próximas semanas
El Ayuntamiento de Madrid está ultimando la nueva normativa que regulará los pisos de uso turístico en la ciudad. Así lo ha avanzado la vicealcaldesa, Inma Sanz, en una entrevista con El Debate, en la que ha explicado que aunque el Consistorio está trabajando con ahínco para conjugar todos los intereses y que el texto sea «equilibrado» es probable que este «no termine de contentar a nadie».
Sanz ha reconocido que no se trata de una norma «sencilla» puesto que hay que tener en cuenta muchas «cuestiones complejas», algo que ocurre no sólo en Madrid sino «en todas las grandes capitales mundiales». Con todo, desde el Ayuntamiento confían en que sea una legislación «eficaz» y que «sirva».
En este sentido, la vicealcaldesa y responsable de Seguridad y Emergencias ha criticado que la normativa que heredó el actual Gobierno municipal de la exalcaldesa Manuela Carmena «no servía» puesto que «dejaba fuera todas las viviendas de uso turístico, pero luego tampoco había ninguna capacidad para tomar medidas al respecto».
Cabe recordar que el pasado mes de marzo, el delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, informó que de las las 4.093 inspecciones que realizó el Ayuntamiento de Madrid sobre las viviendas turísticas en 2023, se detectaron 478 sin licencia, mientras que que otras 243 recuperaron su uso original.
Para Inmaculada Sanz la clave de la nueva normativa está en el «equilibrio» para, por un lado, atajar los problemas de convivencia que hay en algunos barrios de Madrid, en zonas especialmente saturadas con este tipo de viviendas, y, por otro, que siga fomentando el atractivo turístico de la ciudad. «Pero, sobre todo, pensando en el bienestar y la calidad de vida de los madrileños», ha asegurado.
El Gobierno municipal cifra en entre 13.000 y 14.000 las viviendas que están funcionando bajo el uso turístico en la ciudad, algo que considera «preocupante».