La arquitectura brutalista en Madrid: estos son los edificios más emblemáticos

El brutalismo es un estilo arquitectónico singular del siglo pasado, y cuenta con multitud de ejemplos representativos en Madrid. Estos edificios llaman la atención por su tamaño, la peculiaridad de su diseño y porque tienen una estética muy diferenciada dentro de la ciudad, donde la mayoría de los edificios emblemáticos y monumentales evocan estilos más antiguos y ornamentados.

Esta se diferencia de otros estilos arquitectónicos por el uso de materiales «brutos», como el hormigón sin tratar o el ladrillo al descubierto. El diseño es simple, con formas geométricas angulares. Este estilo nació en los años 50 en el Reino Unido, donde se enfatizaban los materiales de construcción en el restablecimiento de las ciudades durante la posguerra. En España apareció en los años 60.

Estos edificios llaman la atención en barrios con una estética con motivos más clásicos. Ejemplos como el Edificio Princesa en Chamberí, o la Torre de Valencia en Salamanca encarnan este contraste.

Esta combinación no es para gusto de todos, ya que muchos consideran estos edificios de los 60 y 70 antiestéticos frente a los edificios modernistas e historicistas que caracterizan los barrios acomodados de Madrid.

Las Torres Blancas, situadas en la Avenida de América, son un ejemplo muy reconocible de este estilo. Con 81 metros de altura, esta estructura a base de cilindros tiene viviendas, oficinas, y hasta una piscina en la azotea.

Esta construcción de mediados de los 60 integra el brutalismo con el organicismo, y supuso un proyecto de vanguardia en la ciudad por el que sus arquitectos y su promotor lucharon.

Otro ejemplo destacado es la monumental Iglesia de Santa Ana en el barrio de Moratalaz. Esta Iglesia tiene un diseño poco común que lleva el arte religioso, habitualmente ostentoso, a su expresión más básica y austera.

El brutalismo, desde sus inicios, está asociado a edificios institucionales y públicos. Un ejemplo son los distintos edificios de la Universidad Complutense de Madrid, con amplios diseños brutalistas en varias de sus facultades.

El Instituto del Patrimonio Histórico Español es otra muestra poco conocida, que está declarada bien de interés cultural. Esta estructura circular edificada en 1985 se encuentra en la ciudad universitaria. Otros entes albergados en edificios brutalistas incluyen la sede del Tribunal Constitucional, o la sede de UGT.