Cáncer de mama metastásico

El grito desesperado de enfermas de cáncer a Mónica García para que financie su medicación: «Nos morimos»

«Si ahora mismo sigo viva es porque me lo puedo pagar», es la reveladora declaración de Victoria Rodrigo, que actúa como portavoz de un grupo de enfermas de cáncer metastásico que, desesperadas, suplican al ministerio de Mónica García que financie el medicamento que necesitan para sobrevivir, algo que Sanidad rechazó por tercera vez el pasado mes de junio.

Rodrigo y sus compañeras han conseguido reunir cerca de 70.000 firmas a través de una petición en Change.org que este martes van a presentar en el Ministerio de Sanidad, ubicado en el madrileño Paseo del Prado. Además de las firmas, estas enfermas van a entregar a la ministra una carta, a la que ha tenido acceso El Debate, en la que le instan a aprobar la financiación de este tratamiento, uno de los más «potentes y prometedores» de los últimos años y que ya se financia en 16 países.

Se trata de los fármacos Enhertu (trastuzumab deruxtecan), para la indicación de cáncer de mama metastásico HER2 Low y Trodelvy (sacituzumab govitecan) para cáncer de mama metastásico con receptores hormonales (HR) positivos y HER2 negativo.

En la actualidad, estos medicamentos están financiados para el cáncer de mama metastásico HER2 positivo que supone el 15 % de las afectadas de este tipo de cáncer, pero no para el otro 85 %, a pesar de que, según apunta Rodrigo, también ha dado buenos resultados para el HER2 negativo y el negativo low.

«Desde que tengo cáncer de mama he conocido muchas mujeres con mi enfermedad que no pudieron acceder a esa medicación como sí puedo recibirla yo gracias a mi seguro privado, que no sé durante cuánto tiempo me podré financiar. A muchas de esas compañeras que no pudieron tratarse las he visto morir. ¿Cuánto vale nuestra vida, Ministerio de Sanidad? ¿A cuántas mujeres más tengo que ver morir?», lamenta Victoria en la petición de Change.org.

«El pasado 19 de junio la Comisión Interministerial de Precios de los Medicamentos (CIPM) no aprobó la autorización para que esta medicación comience a estar financiada por la seguridad social para nuestra enfermedad. Si la EMA (Agencia Europea del Medicamento) ha recomendado las dos nuevas indicaciones que estamos pidiendo autorizar. ¿Por qué lo rechazan entonces por tercera vez?», se pregunta.

En definitiva, Victoria resume su petición en «esperanza y tiempo de vida». «Pedimos que tratamientos ya existentes y válidos para nosotras sean de acceso público. Que los distintos entes se pongan de acuerdo en el precio que le quieren dar a nuestra vida y nosotras no tengamos que preocuparnos también de gestionar la parte burocrática de nuestra enfermedad», agrega, antes de recordar que el coste del tratamiento puede ascender a 5.500 euros cada 21 días.

«Seguimos viendo a nuestras compañeras morir y no podemos quedarnos de brazos cruzados. Ministerio de Sanidad y farmacéuticas, lleguen ya a un acuerdo por favor. Sin esta medicación nos morimos», apostilla.