Juan Lobato, este martes, cuando denunció el «linchamiento» de su partidoEuropa Press

La dimisión de Lobato le permite declarar ante el juez sin ninguna presión por parte del partido

Aunque su carta de renuncia muestra un tono conciliador (al menos en lo que atañe al PSOE madrileño) este viernes comparecerá ante el juez sin ningún tipo de atadura orgánica

El que fuera secretario general del PSOE madrileño, Juan Lobato, ha presentado este miércoles su dimisión después del revuelo generado en torno a su persona por poner ante notario los mensajes que recibió por parte del partido haciéndole llegar un correo sobre los datos fiscales del novio de Isabel Díaz Ayuso.

En una carta a la militancia, Lobato ha justificado su marcha alegando que lo hace «para poner freno a una situación de enfrentamiento y división grave que se estaba generando en el partido, que sólo iba a dañar al PSOE en Madrid y a los avances en la unidad que habíamos conseguido en estos tres años». «Yo no creo en la destrucción del adversario, en la aniquilación del que discrepa y del que piensa diferente. Insisto: para mí la política es otra cosa», ha añadido.

Juan Lobato dimite solo 48 horas antes de declarar ante el juez en calidad de testigo dentro del caso que investiga la filtración de los datos fiscales del novio de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Una citación que se produjo después de trascender que la exjefa de gabinete de Óscar López (Moncloa) le puso al tanto de la situación procesal de Alberto González Amador.

Aunque el tono de la misiva es conciliador con el PSOE (al menos en lo que atañe a la federación madrileña), su marcha le permite declarar este viernes sin ninguna presión por parte del partido. Esta marcha a dos días de la citación le evitaría que cualquier tipo de «lealtad orgánica» condicione su declaración. También es cierto que, al hacerlo en calidad de testigo, no puede mentir en ningún caso.

Deberá presentar el acta

El juez que le llama a declarar ha explicado que acuerda esta citación a la vista de su participación y conocimiento de los hechos presuntamente delictivos que se investigan. En la providencia, el magistrado indica que Lobato deberá aportar copia del acta de manifestaciones notariales que, al parecer, realizó en relación con los hechos.

«Sin duda mi forma de hacer política no es igual ni quizá en ocasiones compatible con la que una mayoría de la dirigencia actual de mi partido tiene», ha dicho Lobato, en clara alusión a la dirección nacional. «No pasa nada. Lo asumo democráticamente. Pero no puedo renunciar a ser como soy y como he sido siempre», ha lanzado.

El ya exsecretario del PSOE madrileño ha continuado con una crítica al actual modus operandi de su formación, al recalcar la importancia de apostar por la política «con mayúsculas», la que «escucha, la que argumenta, la que no insulta o aniquila al propio o al de enfrente, sino que trata de convencerle y buscar puntos en común».