Fachada del Hospital Universitario Príncipe de Asturias de Alcalá de HenaresEuropa Press

Condenan a 18 años de cárcel al conductor de una ambulancia que degolló a un enfermero por un ataque de celos

Además, se le sentencia a indemnizar con 230.00 euros a cada uno de los dos hijos de la víctima, con 43.000 euros a sus progenitores y con 18.000 euros a cada uno de los tres hermanos

La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a 18 años de prisión al conductor de ambulancias que mató a cuchilladas en marzo de 2021 a un enfermero del Hospital Príncipe de Asturias, en Alcalá de Henares, del que sospechaba que mantenía una relación con su pareja sentimental. Así consta en una sentencia en la que se condena al acusado por un delito de asesinato con una atenuante de dilaciones indebidas muy cualificadas.

En vía de responsabilidad civil, se le condena a indemnizar con 230.00 euros a cada uno de los dos hijos de la víctima, con 43.000 euros a sus progenitores y con 18.000 euros a cada uno de los tres hermanos.

El condenado accedió al centro hospitalario vestido con un uniforme de conductor de ambulancia y sorprendió a su víctima mientras disfrutaba de un descanso en una sala de estar del complejo sanitario, sin darle oportunidad alguna a la defensa, a fin de asegurarse, dice la resolución que se acompaña en archivo adjunto, «de que conseguiría matarlo sin riesgo» para él.

«Nada pudo hacer la víctima, que deja a dos hijos menores, para evitar la agresión, por lo sorpresivo e inesperado del ataque», recoge la resolución.

A esta conclusión llegó el jurado popular que siguió la vista y que consideró al acusado culpable de matarlo causándole sufrimientos adicionales que resultaban innecesarios para poner fin a su vida previos al fallecimiento, como fueron los repetidos apuñalamientos en muy diferentes partes del cuerpo, entre otras, la cara, ambas zonas inguinales, el tórax, la espalda y el cuello, y una última herida de degüello.

El crimen de Sergio G. se produjo alrededor de la dos de la tarde del 6 de marzo de 2021 en la sala de enfermería del hospital de Alcalá de Henares. Gonzaló R. I., de 42 años, entró armado con el uniforme de conductor de ambulancias y le apuñaló en repetidas ocasiones.

El trabajo ha sido publicado en la prestigiosa revista 'Frontiers In Medicine'EP

La fiscal solicitaba en su escrito inicial 21 años de condena, si bien modificó su petición conforme a las periciales forenses que dejaron patente que el agresor se ensañó con su víctima, a quien originó 27 lesiones incisas y penetrantes de carácter mortal.

El agresor degolló a su víctima, quien inmediatamente después cayó al suelo. Pese a ello, siguió apuñalándolo hasta que llegaron varios agentes de la Policía Nacional, que se encontraban en la sala de Urgencias custodiando a un preso.

En su declaración, el procesado reconoció que le cortó el cuello por celos y alegó que sufrió un trastorno mental transitorio después de que la víctima le comentara que iba a seguir «violando» a su por aquella época compañera sentimental y a su hija menor.

Sin embargo, las imágenes de las cámaras de videovigilancia desmontan su versión, ya que muestran cómo entró en el hospital buscando a Sergio en varias estancias y sin mediar palabra le ataca brutalmente.