(Foto de ARCHIVO) Un agente de la Guardia Civil, de espaldas, junto a un vehículo oficial.GUARDIA CIVIL

Sucesos

Detienen a siete personas por robar 10.000 euros en bares y farmacias usando tapas de alcantarilla

Además de los robos en los establecimientos comerciales, a los detenidos se les atribuye delitos por hurto de gasóleo

Los efectivos de la Guardia Civil han detenido a siete personas imputadas de realizar 17 robos con fuerza, llegando a sustraer 10.000 euros en efectivo en locales de Madrid y Toledo. Para llevar a cabo sus crímenes, los ladrones utilizaban tapas de alcantarilla para destrozar los cristales de los establecimientos tales como farmacias, bares, tiendas de comida y clínicas dentales.

Se empezó a investigar a partir de un robo sucedido en un bar de Seseña, Toledo. Para adentrarse, los ladrones quebraron los cristales con una alcantarilla, después forzaron una máquina tragaperras y se llevaron el dinero que poseía.

Este modus operandi se reiteró en otros establecimientos, desencadenando en una seguidilla de denuncias que posibilitó a los agentes identificar un conjunto de asaltos con las mismas características.

«El método del alcantarillazo es una técnica utilizada por delincuentes para acceder de manera forzosa a establecimientos comerciales. Consiste en utilizar una tapa de alcantarilla, generalmente robada, como herramienta para romper escaparates o puertas de cristal mediante un impacto violento», han declarado fuentes policiales.

«Estas tapas, que pueden pesar más de 30 kilos, suelen ser sustraídas con el uso de barras de metal u otras herramientas que permiten hacer palanca y levantarlas, aprovechando calles con menor tránsito peatonal o vehicular y la falta de vigilancia nocturna.

Este modus operandi, comúnmente ejecutado durante la madrugada, tiene como objetivo sustraer dinero y mercancías de valor en un tiempo muy breve y con una escasa sofisticación, minimizando así el riesgo de ser sorprendidos", han sostenido.

Algunos robos se cometieron en varias zonas del sur de la capital, concretamente en Arganda del Rey, Pinto y Villaconejos, y otros al norte de Toledo, Seseña, Esquivias y Añover de Tajo. De acuerdo con el proceso de indagación, la banda de delincuentes tenía como fin robar dinero en efectivo de las cajas registradoras y de las máquinas tragaperras, generando significativos daños materiales en los negocios.

Fuentes de la Guardia Civil señalan que «gracias a la colaboración ciudadana y a testigos de los hechos, los agentes han podido recabar información de todos los delitos en comercios realizados por estas personas, en los que robaban el dinero en efectivo de las tragaperras o sustraían las cajas registradoras. En total, los autores consiguieron hacerse con un botín de 10.000 euros en metálico del total de sus asaltos».

Además de los robos en las tiendas, a los detenidos también se les atribuye delitos por hurto de gasóleo, debido a que muchas veces abandonaron gasolineras sin pagar el combustible que recargaban previo a los asaltos nocturnos.

Los detenidos confrontan varios delitos de robo con fuerza, que significaría una pena de prisión de dos a cinco años y hurto de gasoil que implicaría una sanción económica o incluso tres años de cárcel, dependiendo de la cantidad de combustible sustraída. Es así que, los infractores, están a disposición de la justicia.