Equipos del SUMMA 112 en MadridComunidad de Madrid

Emergencias Madrid ha atendido 1.846 llamadas en Nochebuena: 161 agresiones y 66 intoxicaciones etílicas

Bomberos, servicios médicos, y agentes forestales han trabajado durante toda la jornada, apoyados por más de 2.500 profesionales

El Centro de Emergencias 112 de la Comunidad de Madrid atendió esta Nochebuena, entre la medianoche y las 9 horas de este miércoles, un total de 1.846 llamadas en toda la región, un 7,3 % que el año pasado, según datos oficiales de la Agencia de Seguridad y Emergencias.

Entre esos avisos destacan las 161 reyertas y agresiones, un 61 por ciento más que la Nochebuena de 2023 (100); los 37 incendios, un 54,2 por ciento más que el año pasado (24); las 66 intoxicaciones etílicas, un 40,4 % más que en 2023 (47); y los 22 accidentes de tráfico, frente a los 20 de 2023, un 10 por ciento más.

No obstante, pese al aumento de estos incidentes, sobre todo de reyertas, la mayoría de las atenciones fueran sanitarias y ninguna de gravedad o de especial relevancia, han indicado a Europa Press fuentes de Emergencias 112. No se ha registrado ningún fallecido por estos conceptos.

Bomberos, servicios médicos, y agentes forestales han trabajado durante toda la jornada, apoyados por más de 2.500 profesionales, para garantizar la seguridad de los madrileños.

Entre ellos 1.580 bomberos, 288 agentes forestales, un centenar de voluntarios del Equipo de Respuesta Logística Inmediata de Voluntarios de Protección Civil (ERIVE), más sus tres jefes de operaciones, así como más de 350 trabajadores diarios del Servicio de Urgencia Médica (SUMMA 112).

Además de los 180 profesionales que conforman el Centro Madrid 112 (9 Jefes de sala, 9 supervisores, 13 coordinadores auxiliares de emergencias CAE y 149 gestores). A ellos se suman todos los efectivos de las policías locales y protecciones civiles de los municipios, coordinados a través del Centro de Coordinación Municipal (CECOM).

Aunque la noche es más tranquila que Nochevieja, los accidentes de tráfico y descuidos domésticos, como los incendios en cocina y decoraciones encendidas, pueden aumentar el riesgo.