Visión antigua y moderna de las Torres de Colón

¿Cuál es la Torre de Colón que prefieren los madrileños?

Estos dos edificios han supuesto un símbolo significativo en la ciudad de Madrid

En los años 70 la ciudad de Madrid contaba con varios rascacielos conocidos a nivel europeo. Zonas como Gran Vía, Plaza de España o la calle Alcalá eran las que protagonizaban el estreno de estos imponentes y modernos edificios. Algunas de estas construcciones se han convertido hasta la actualidad en verdaderos emblemas de la ciudad como es el caso de las Torres Colón.

Las Torres Colón han supuesto desde 1976, fecha en la que se certificó la finalización de su construcción, un símbolo significativo de Madrid. Con 117 metros de altura, una superficie de más de 20.000 m², 30 plantas y un aparcamiento de 123 plazas, son uno de los edificios más codiciados de la capital de España.

Ubicadas en la plaza de Colón, haciendo esquina con la Castellana y dentro del distrito de Chamberí, fue el edificio más alto de la capital española hasta que se terminó la construcción de la Torre Picasso en 1989.

Una de sus principales características es su estructura suspendida. Es un edificio que llama la atención, ya que se componía de dos robustos pilares que en su parte superior se unían a través de una plataforma sobre la que colgaban 18 péndulos atirantados por cables de acero.

En sus 48 años de vida el edificio se ha sometido a tres reformas. Sin embargo, estas han sido para ofrecer soluciones estructurales en base a las necesidades de la ciudad. Es decir: el diseño no se veía afectado.

Montaje del antes y después de las Torres Colón

Este año se prevé que esté todo listo para que el despacho de abogados Garrigues entre en sus oficinas. El objetivo de esta remodelación ha sido convertir las dos torres en las más modernas y sostenibles de Madrid. Innovación, diseño y sostenibilidad son los puntos fuertes de este proyecto de rehabilitación.

La antigua estructura destacaba por los colores ámbar y el característico verde del revestimiento superior, más conocido como «el enchufe», por los dos copetes.

Ahora ha sido retirado para el nuevo proyecto, y dará lugar a cuatro nuevas plantas de oficinas. «La verdad que es una pena, son historia de la ciudad, pero hoy en día todo cambia muy rápido», comenta Teresa, vecina del barrio.

Imagen de las Torres ColónMutua Madrileña

El edificio actual destaca por su estructura suspendida o colgante, diseño innovador en el momento de la construcción de estas torres. La remodelación ha mantenido esta característica original íntegramente, modificando únicamente el diseño y arquitectura exteriores.

Se ha conservado la altura original de 117 metros, así como la superficie total actual, de 20.298 m². Las entradas de acceso y a las zonas comunes a pie de calle también han sido actualizadas con esta transformación.

El Debate ante esta transformación publicó una encuesta para ver cuál de los dos modelos le gusta más a los madrileños. Los datos desprenden lo siguiente: el 50,12 % prefiere el modelo antiguo, frente a un 49,88 % que apuesta por la renovación y el futuro de la arquitectura del siglo XXI.

¿Por qué no se quiere la reforma?

  • Los motivos por los que parte de la ciudadanía no quiere su reforma son históricos ya que las Torres muestran una iniciativa de la arquitectura del siglo XX; son sociales, pues al haberse convertido en un emblema de Madrid no se quiere tener un edificio desconocido en pleno centro; y también hay motivos externos que ralentizan su construcción, como la falta de material, huelgas… y un largo etcétera de condicionantes.

¿Por qué se quiere la reforma?

  • Por otro lado, los que sí quieren su reforma son los que entienden que las cosas cambian y se adaptan al momento presente. Es una realidad que las empresas están cada vez más comprometidas con la sostenibilidad, apuestan por un diseño hermético futurista, ya que nivel internacional quieren mantener una imagen y posicionamiento. Y, la creación de nuevos colegios, hospitales e incluso viviendas demuestra que hay un cambio en el diseño e infraestructura a nivel generalizado.