Movilización contra el cantón de Montecarmelo

Ayuntamiento de Madrid

Un informe descarta que haya restos de brigadistas en la parcela del futuro cantón de Montecarmelo

Este sistema de búsqueda no detecta restos humanos, solo movimientos anómalos

El informe que solicitó el Ayuntamiento de Madrid para conocer si había restos de Brigadistas Internacionales en la parcela del futuro cantón de Montecarmelo ya se ha realizado. El objetivo era determinar si había o no anomalías en el terreno a través de un georradar. El alcalde madrileño, José Luis Martínez-Almeida, ha señalado que «no hay ningún tipo de evidencia sobre que haya habido un movimiento anómalo de tierras que indicara que pueda haber algún tipo de resto».

Este sistema de búsqueda no detecta restos humanos, sino solo movimientos anómalos. Existen herramientas para ello, pero el Ayuntamiento las ha desestimado.

Por otro lado, Almeida ha explicado que en la parcela colindante donde se pretende levantar el cantón de Montecarmelo, «sí se ha detectado un movimiento anómalo de tierras», aunque no se podrá saber de qué se trata sin excavar, una tarea que corresponde al Gobierno central por ser un asunto de memoria democrática.

Así, ha señalado que entregarán el informe al Ministerio Política Territorial y Memoria Democrática para que compruebe si hay restos humanos y, en su caso, de la Guerra Civil. De esta manera podrán hacer las investigaciones que estimen oportunas.

Los trabajos de geolocalización comenzaron en abril de este año tras el aviso de la Asociación de Amigos de Brigadistas Internacionales, quien informó al Consistorio de una posible fosa común en estos terrenos con 451 cuerpos de la Guerra Civil.

Reyes Maroto y

Estos fueron los Brigadistas

Durante la Guerra Civil se estima que más de 35.000 hombres y mujeres de 53 países distintos acudieron a España para apoyar al Gobierno de la II República. Se estima que más de 9.000 de estas personas perdieron su vida en nuestro país.

Las Brigadas Internacionales fueron unidades militares compuestas por voluntarios procedentes de más de 50 países que participaron en la Guerra Civil (1936-1939) dentro del ejército de la Segunda República.

Antes de la formación de la Brigada Internacional, en octubre de 1936, habían llegado a España numerosos voluntarios que venían por su cuenta a inscribirse en diferentes unidades de su afinidad ideológica. Algunos ya residían en España, bien por estudios o porque eran exiliados políticos.

Discurso de despedida a las Brigadas Internacionales

La idea de crear este grupo se gestó en verano de 1936 a partir de diversas iniciativas paralelas, entre otras del Partido Comunista francés. La reunión de la Comintern celebrada en Moscú el 18 de septiembre de 1936 dio el aval a esta propuesta y los partidos comunistas se comprometieron desde entonces a reclutar a voluntarios dispuestos a participar en la lucha junto a los republicanos españoles.

El 15 de octubre se constituyó el primer grupo responsable de la organización, formado por Luigi Longo, Mario Nicoletti, Pierre Rebière y otros. Dos días más tarde, una delegación presentó a Largo Caballero el proyecto de constitución de la Brigada Internacional.

El Presidente del Consejo de Ministros firmó finalmente su aprobación el 22 de noviembre. Se decidió que el cuartel general y las bases de instrucción estarían en Albacete. El mando directo recayó en el comunista francés André Marty, y la supervisión gubernamental sería ejercida, de momento, por Martínez Barrio.