Sala de objetos perdidos del Metro de Madrid

Ayuntamiento de Madrid

Los objetos más peculiares que se han perdido este año en Madrid

Los objetos podrán ser entregados a quienes acrediten su propiedad en la Oficina

Relojes, carteras, móviles, tarjetas de transporte... son algunas de las pertenencias que quedan en el olvido en el Metro y en las calles de Madrid. Por suerte, para los más despistados el Ayuntamiento cuenta con un espacio para que sus propietarios puedan volver a encontrar sus pertenencias. La Oficina de Objetos Perdidos no entiende de estaciones y muestra de ello es que en junio recibió 6.180 olvidos, entre ellos desde unos esquís a abanicos y respiradores.

También almohadas cervicales, audífonos, básculas, carritos de bebé, carros de la compra, un disco de vinilo, glucómetros, una máquina de cortar el pelo, un micrófono, un microondas, un proyector de luces y música, videoconsolas, videojuegos y un walkie talkie.

Hasta 299 auriculares llegaron a estas instalaciones municipales en junio, igual que 144 bolsos, 22 cámaras, 843 monederos, 385 cinturones, 777 gafas, 82 libros, 289 llaves, 83 maletas, 145 mochilas, 24 paraguas y 228 teléfonos móviles.

Los objetos podrán ser entregados a quienes acrediten su propiedad en la Oficina, situada en el paseo del Molino, 7 y 9, en días laborales. Está abierta de 8.30 a 14 horas de lunes a viernes.

¿Dónde van los objetos perdidos del Metro?

Metro de Madrid también cuenta con una oficina de objetos perdidos. Situada en Plaza Castilla, cada día recoge una docena de pertenencias y de muy diversa índole. Entre los objetos más anómalos destacan microondas, neveras de playa, sillas de ruedas o aparatos dentales.

En esta línea, también se han llegado a encontrar peluquines, un estuche con una estola y un crucifijo, carritos de bebé, un saxofón, un árbol de Navidad, una cabeza gigante de Mickey Mouse... la lista es muy variada y alocada.

La Oficina de objetos perdidos en Madrid

Antes de llegar a esta pequeña ciudad de objetos perdidos, las pertenencias pasan tres o cuatro días en las estaciones donde fueron encontrados, con el objetivo de que el propietario pueda localizarlas fácilmente.

En caso de que nadie reclame estos objetos, se envía a la Oficina de Objetos Perdidos de Metro de Madrid. Aquí permanecen un total de 21 días y los separan por categorías para archivarlos de manera ordenada.

En caso de que lleguen tarjetas del abono transporte, se envían al Consorcio Regional, mientras que los objetos personales suelen terminar en objetos perdidos del Ayuntamiento de Madrid.

sala de objetos perdidos del Metro de Madrid

Lo que más pierden los madrileños es, sin duda, el abono transporte. Más del 50 % de los objetos que reciben corresponden a estas tarjetitas rojas que permiten al viajero desplazarse, con total libertad, por todo el territorio de la Comunidad de Madrid.

Pero, ¿qué ocurre si nadie los reclama? Según el artículo 615 del Código Civil, «el que encontrare una cosa mueble, que no sea tesoro, debe restituirla a su anterior poseedor. Si éste no fuere conocido, deberá consignarla inmediatamente en poder del Alcalde del pueblo donde se hubiese verificado el hallazgo».

Y sigue: «Pasados dos años, a contar desde el día de la segunda publicación, sin haberse presentado el dueño, se adjudicará la cosa encontrada o su valor al que la hubiese hallado». Ya ven que si encuentran algo y nadie lo reclama, puede ser suyo.