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El coordinador general de la coalición, Arnaldo OtegiEuropa Press

Elecciones País Vasco

Los cuatro condenados por sus vínculos con ETA que figuran en las listas de Bildu para el 12-A

Además de Arnaldo Otegi, Iker Casanova, Ikoitz Arrese y Arkaitz Rodríguez han enfrentado penas por su pertenencia al terrorismo

Los ciudadanos del País Vasco están convocados a las urnas el próximo domingo 12 de abril para elegir al nuevo lendakari que liderará la comunidad durante los próximos cuatro años. Nuevos líderes y candidatos han surgido para intensificar la maquinaria electoral y hacer frente a unos comicios no solo decisivos en el territorio vasco, sino en el conjunto del país.

Ya iniciada la campaña electoral y conocidas las candidaturas de los distintos partidos, hay tres dirigentes de Bildu condenados en su día por sus vínculos con ETA. Estos son Arkaitz Rodríguez, Iker Casanova e Ikoitz Arrese, entre los cuales acumulan unas dos décadas de condena.

No es la primera vez que los abertzales llevan en sus listas a candidatos con antecedentes terroristas e incluso con delitos de sangre a sus espaldas. Para las elecciones municipales del 28-M, Bildu llevaba 44 candidatos condenados por su pertenencia a la banda terrorista. Tras el escrutinio definitivo, 15 de esos condenados obtuvieron un escaño (dos de ellos tenían delitos de sangre).

Para estos comicios son cuatro los condenados por sus vínculos con el terrorismo. El primero, Arnaldo Otegi, coordinador general de Bildu. Aunque no se presente como cabeza de cartel –como candidato a lendakari ha colocado a Pello Otxandiano– sigue ocupando un puesto en la lista por Guipúzcoa.

Iker Casanova

Casanova es el que más tiempo ha pasado en la cárcel. Su condena fue de once años de prisión, aunque no llegó a cumplirla íntegramente. El candidato por Vizcaya fue condenado por la Audiencia Nacional en 2007 a esos 11 años de cárcel e inhabilitación para ocupar un cargo público. Casanova salió de prisión en 2011 y actualmente ocupa un escaño en Bildu que ha provocado una marea de críticas por parte de las víctimas y familiares.

Solo tres años después de salir de prisión Casanova ocupó su primer escaño en el parlamento vasco. En la revista de Covite de septiembre de 2014, Consuelo Ordóñez condenó dicho nombramiento. Lo hizo en un carta a su hermano Gregorio, parlamentario vasco del PP asesinado por ETA en 1995, y que posteriormente remitió a diversos medios de comunicación: «Uno de los que contribuyeron a matarte, a ti y a otros cientos, ocupa desde el martes el escaño que te arrebataron a balazos en aquel restaurante donde comiste por última vez», escribió entonces.

Ikoitz Arrese

El número seis por Vizcaya fue integrante de la organización juvenil Segi, la cantera juvenil de ETA ilegalizada en 2002. Se le acusó de un delito de integración en organización terrorista y fue el entonces juez de la Audiencia Nacional, Fernando Grande-Marlaska, quien ordenó su ingreso en prisión. Allí estuvo año y medio.

Arkaitz Rodríguez

Y por último, Arkaitz Rodríguez Torres, número dos por Guipúzcoa. El actual secretario general de Sortu –partido que sustituyó a Batasuna– fue también condenado en el caso Bateragune por pertenencia a banda armada. Compartió cárcel con Arnaldo Otegi, al que también reemplazó como secretario general de Sortu. Recientemente ha tenido palabras de elogio y exaltación para etarras fallecidos como Iñaki Larramendi (fundador de la banda) o José Ramón Foruria (condenado a 40 años de cárcel).