Loewe rinde pleitesía a la arruga con Maggie Smith en el centro de su nueva colección otoño-invierno

Arrugas, pelo canoso y ojos enrojecidos son tres cosas que no suelen estar presentes en campañas de moda. Pieles tersas y excesivamente jóvenes, caderas imposibles y cinturas de avispa suelen ser lo habitual en las marquesinas. Con las grandes marcas clásicas del retail en búsqueda continua de ese personaje actual y moderno que les conecte con las nuevas generaciones, Loewe ha hecho una apuesta poco habitual y ha colocado en primera línea a una modelo con más arrugas que seguidores en redes sociales (porque no participa de ninguna de ellas). Fue la superiora de un convento convertida en corista en Sister Act, fue Wendy Moira Ángela Darling en Hook, pero el grueso de la población la reconocerá por sus últimos papeles como la profesora Minerva McGonagall de la saga Harry Potter. Es la nonagenaria y experimentada actriz Maggie Smith.

En una oda total a la arruga, la marca española Loewe en manos del fotógrafo Juergen Teller ha decidido apostar por la experiencia física y huir del photoshop tan manido en el mundillo fashion. No veremos a Smith desfilando por la pasarela –ay si eso fuera posible...–, pero muchas señoras clientas habituales de la marca se verán identificadas y podrían experimentar un segundo enamoramiento de la marca que ya se convirtió en un habitual de su armario.

Durante muchos años, Smith fue una actriz de Hollywood con lo bueno de la fama y lo bueno del anonimato: gozaba de reputación en la meca del cine pero tampoco tenía una legión de acérrimos fans. Era alguien querido y aplaudido, pero no levantaba pasiones. Eso se terminó con su aplaudida participación en la adaptación de las novelas de J. K. Rowling y con su papel de Violet, la condesa viuda de Grantham, en Downton Abbey. Desde ese momento, la británica Maggie Smith pasó a convertirse en un icono y en un ejemplo de que las arrugas no son un impedimento para triunfar en la vida.

Creció pensando que su carrera como actriz nunca despegaría. Su madre no le ayudó: «Nunca lograrás ser actriz con una cara como esa», le dijo en una ocasión como la propia actriz confesó en una entrevista. Si su madre se alzara de la tumba podría comprobar ahora cómo no hay persona nacida después de los años 90 que no la reconozca o que no la alabe por sus exitosos y recientes papeles. Y, para asombro de muchos, ahora protagoniza la nueva colección otoño-invierno de una de las marcas de moda española más reconocidas del territorio y parte del extranjero.