El disparatado precio de venta en una subasta del tutú de Sarah Jessica Parker en ´Sexo en Nueva York´

Cuando mezclamos la moda y el entretenimiento, hay personajes que instantáneamente vienen a nuestra mente, como también lo hacen ciertas prendas que trascienden la pantalla para convertirse en verdaderos iconos culturales.

Lo sabe bien la famosa casa de subasta Julien's, especializada en ropa y objetos de Hollywood y en prendas que han llevado distintas celebridades en ocasiones especiales, como cumpleaños o entregas de premios.

Con permiso de los diseños de Dior o los vestidos de alta costura de Balenciaga, esta vez la estrella fue el lote 31: el tutú blanco que llevó Carrie Bradshaw de Sexo en Nueva York en los créditos de las seis temporadas de la serie. La emblemática prenda estuvo al alcance de los fanáticos y coleccionistas con un precio de salida de 2.000 dólares, aunque se estimaba que la venta final superaría los 8.000.

No había empezado la subasta y las pujas por internet empezaron a subir rápidamente. En pocos minutos superaba ya los 30.000 dólares, hasta que en un último empujón alcanzó los 40.000 dólares como precio final. Una cifra significativa teniendo en cuenta que a la estilista de la serie, Patricia Field, le costó la irrisoria cantidad de 5 dólares.

El diseño estaba formado, como explicaba la ficha técnica, por una falda de tres capas de tul blanco con una banda de satén como cinturilla en el mismo tono. Las medidas son 58 centímetros de cintura, 81 de cadera y 40 de largo. El conjunto se acompañó de un top rosa de tirantes y de unas sandalias de tacón de Jimmy Choo.

La falda no tiene etiqueta, tampoco talla. Más allá de ello, la particularidad es que, en realidad, existen cinco como este. Fue la propia actriz quien explicó en una entrevista que para rodar la mítica cabecera se necesitaron varios por la escena en la que el autobús la salpica y la mancha. Por este motivo, en el documento de venta se ha adjuntado un certificado de autenticidad que confirma que es uno de los utilizados en la serie.

En 2018 Darren Star, creador del programa de HBO, dijo a Entertainment Weekly que Carrie por poco usó un vestido de pasarela de Marc Jacobs en los créditos iniciales, pero al final, Sarah Jessica lo convenció de seguir con el tutú. La actriz lo volvió a llevar en la primera de las dos películas que se hicieron tras el final de la serie, cuando la escritora limpia su armario con la ayuda de Charlotte, Samantha y Miranda.

Los responsables de Julien's se han mostrado emocionados ante el éxito de la subasta. «Es una pieza histórica. Definió la serie y definió una era».