Las 7 mejor vestidas de los Grammy 2024

La ceremonia suele ser menos elegante que las del mundo del cine, en el que ya existen relaciones quasi permanentes entre ciertas actrices y ciertas casas de modas

Miley Cyrus. Cambió cinco veces su atuendo y recibió dos Grammys por «Flowers», el hit del año pasado, que se escuchó tanto que ya nadie se atreve a ponerlo por cansancio colectivo, aunque es una magnífica canción. Para recibir uno de sus premios escogió un mono de pailletes en color negro de Tom Ford, absolutamente de actualidad por el color y el material, con escote halter al cuello, eso si, un halter combinado con un escote recto de impresión que llevó con cierta discreción para sus estándares.

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Dua Lipa. Otro escotazo bien conseguido a manos de Courrèges, un vestido elaborado con piezas metálicas plateadas, mangas largas y dos bolsillos laterales que no llegaban a ninguna parte, puesto que mostraban la piel de sus caderas. El escote, de vértigo, no se movió en ningún momento, facilitando la labor la fisonomía de Dua Lipa y los actuales inventos de cinta adhesiva para tales atuendos.

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Olivia Rodrigo. Con un elegante vestido vintage de Versace en tono crudo y pedrería, la cantautora y actriz Isabel Rodrigo, nacida en California y famosa por su participación en The High School Musical o en Bizaardvark, demostró que a los 20 años se puede ser prudente, acertar y brillar sin ser radical ni escandalizar con el atuendo.

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Janelle Monae. Vestida con un impresionante modelo negro de Armani, la cantante, compositora, productora y actriz estadounidense brilló por el impecable corte e impresionante ejecución de su atuendo, un palabra de honor en pedrería con ribetes. Janelle, una apasionada de la moda, suele trabajarse sus elecciones y acertar.

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Lana del Rey. Casi irreconocible con su nueva melena negra con flequillo, la cantante escogió un modelo vintage de procedencia desconocida que bien podría haber pertenecido a alguna de las colecciones entre tenebrosas y ursulinas de las hermanas Rodarte. Original, inesperada y extraña, llevó la tendencia de los hombros anchos a su máximo nivel.

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Taylor Swift. La famosísima cantante, de quien se dice que inaugurará el nuevo Bernabéu con su actuación, eligió un vestido palabra de honor de escote recto en blanco roto obra del equipo de Schiaparelli. Con la cintura fruncida en un lateral junto a la cadera, peep-toes negros y guantes largos en el mismo tono, escogió un modelo clásico dándole un twist de locura al que nos tiene habituados.

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Miley Cyrus. De nuevo, y justo al comenzar los Grammys, la cantante aterrizó en la alfombra roja cual diosa egipcia con un vestido mínimo-minimorum de red metálica dorada obra de Maison Margiela. Como John Galliano estará seguro detrás de la obra, el resultado es la evidente perfección de las medidas en un vestido que tapaba milagrosamente lo que tenía que tapar, mostrando los tatuajes de la Cyrus a su gusto. Increíble e impecable factura.

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