Siete vinos de altura que miran a Sierra Nevada

Uno siempre recuerda un vino o empieza a consumir los de la zona porque tiene un recuerdo especial de una experiencia inolvidable. El mío, en este caso, es tomando una botella de vino mientras comía en la propia Alhambra de Granada. Me gusta probar y tomar los vinos de la zona, aquellos que se producen en los sitios que por turismo o trabajo tienes la ‘obligación’ de visitar.

Estos vinos que miran a Sierra Nevada también miran a la historia de una ciudad, Granada, cuyo Patrimonio Mundial está representado por la «Alhambra, el Generalife y el Albaicín». Fue en 1984 cuando se inscribió la Alhambra y el Generalife, siendo el primero de los 5 primeros monumentos españoles en ser declarados Patrimonio Mundial por la UNESCO.

La elaboración de vinos en la D.O.P. Granada cuenta con una tradición milenaria y es casi más interesante como se divide una subzona que corresponde a la Contraviesa-Alpujarra. Sea en la cara norte o en la cara sur de esta sierra majestuosa, los vinos respiran y asumen las características de unos viñedos situados por encima de los 1.000 metros por encima del nivel del mar.

Oro

En este recorrido especial por viñedos que tocan el cielo, empiezo por donde me conquistaron. El Oro que me hizo ver el mundo del vino de Granada de otra manera. Así se llama el vino, Oro, de Bodegas Señorío de Nevada, situada al pie de Sierra Nevada y con la influencia de la Costa Tropical, se beneficia de un microclima especial y de unos suelos mineralógicamente únicos. A partir de estas condiciones y de las uvas Cabernet Sauvignon, Merlot, Tempranillo, Syrah, Petit Verdot, Garnacha, Viognier y Vigiriego.

Tinajas

La altura interviene de manera determinante en la elaboración de estos vinos para conseguir una maduración de la uva mucho más lenta y compleja. La oscilación térmica entre el día y la noche es muy importante, lo que a la postre, repercutirá en la consecución de un vino de mayor calidad. En el caso de Fonte Dei una de las zonas donde se encuentra su mayor parte de viñedo es en el término municipal de Alhama de Granada, en la Sierra de Tejeda, a 1.200 metros de altitud. Su vino Tinajas, como su propio nombre indica, pasa 12 meses de crianza en tinajas de terracota algo que le añade aún más particularidad a una producción de tan sólo 272 botellas.

Muñana

Si la altura es un valor para el vino, la historia y tradición de Bodegas Muñana respira en una tierra en la que los romanos elaboraban vino hace dos mil años. El término Muñana deriva probablemente de la palabra árabe-hispana al munya (huerto o granja), y esta a su vez del árabe clásico al-munyah (deseo). Esta palabra designaba en origen un huerto o una casa de campo, rodeada de jardines y tierras para cultivo. La Finca de Peñas Prietas, donde se producen los vinos de Muñana, se extiende por 180 ha (hectáreas) y linda con el Parque Nacional de Sierra Nevada y cercana al Mediterráneo crea unas condiciones climáticas muy especiales, que permiten el cultivo de un número significativo de variedades de uva, superior al de otras zonas geográficas.

Rey Zagal

En esa historia milenaria, los nombres de bodegas y vinos hacen referencia continua a los nombres de los que habitaron estas tierras. Es el caso de Bodegas Al Zagal, situada en la localidad de Cogollos de Guadix, enclavada en la falda de la cara norte de Sierra Nevada, en lo que se denomina el Marquesado del Zenete. El nombre de los vinos proviene del sultán Abū AbdAllāh Muhammad az-Zaghall de Granada, llamado por los cristianos Al Zagal (el valiente) que fue rey de Granada de 1485 a 1486 con el nombre de Muhammed XIII.

Tinto Piedras Blancas 2020

En la subzona de La Contraviesa–Alpujarra los vientos mediterráneos templan aún más el clima y consiguen que los vinos sean equilibrados a la vez que con mayor volumen por los grados ganados en la noche. La producción se expande a vinos ecológicos, veganos y de altura como es el cao de Piedras Blancas.

Marqués de La Contraviesa

A pesar de la cercanía del Mar Mediterráneo los viñedos se sitúan en algunos casos en una altitud media de 1.150 metros y en lomas y laderas que establecen unos parámetros entre 21 y 36% de pendiente. Es el caso de la bodega Finca Cuatro Vientos, cuya propiedad indica que «en verano la generosidad del Mediterráneo envía al atardecer densas nieblas que humedecen las vides».

Loma de Los Felipes 2016

En la misma Sierra de la Contraviesa, situada a unos 70 Kilómetros al sureste de Granada, se establece Bodega Los Barrancos. Esta sierra tiene una situación estratégica entre las cimas cubiertas de nieve de Sierra Nevada y el mar Mediterráneo, con una longitud de 15 kilómetros y una altura media de 1250 metros sobre el nivel del mar constituye una de las regiones vitivinícolas más altas de Europa. Esta bodega produce pequeñas ediciones limitadas y en el caso de Loma de Los Felipes no suele superar las 2.500 botellas.

La altura de los viñedos complica el cuidado del viñedo, la producción y, en último término, la elaboración de estos vinos que han ganado calidad y mercado en los últimos años y que con ediciones muy limitadas se convierten en productos casi exclusivos.

Tiempo de Vinos (https://www.tiempodevinos.com)