Abre sus puertas la estación de esquí más cara de España

35 centímetros de nieve. La meteorología se ha aliado en el último momento con el esquí y ha hecho posible, contra los pronósticos iniciales, que Baqueira estrene este sábado la temporada del deporte blanco en España. La mayoría de las estaciones en suelo patrio pondrán de nuevo sus remontes en marcha el próximo fin de semana, el primero de diciembre, y la gran afluencia de esquiadores de la temporada se espera en el puente de la Inmaculada, al caer este año la festividad religiosa en viernes y el día de la Constitución en miércoles. Habrá que estar, en todo caso, pendientes de las temperaturas, que muchas veces son las que tienen la última palabra.

La veterana y querida estación aranesa está considerada una de las mejores de España, sino la mejor, por la calidad y cantidad de su nieve, orientación de sus laderas y por su nivel de servicios. También es la más cara. Atrae a numerosos rostros conocidos, entre ellos miembros de la realeza como el Rey Felipe.

Con 170 kilómetros de pista, Baqueira añade este año tres nuevos recorridos. Inaugura nueva cafetería, La Choza, en la cota 1.800, que toma el nombre del mítico telesilla, ya en desuso, muy familiar para los Reyes Juan Carlos y Sofía y sus hijos. La estación debuta hoy con el clásico Hotel Montalto, el primer hotel a pie de pista de la estación catalana, completamente renovado tras tres años de reformas. En el capítulo de alojamiento hay que señalar el debut de un nuevo cinco estrellas, MiM Baqueira, propiedad de Leo Messi, que aunque ya estaba operativo, se posiciona ahora en la máxima categoría tras una importante renovación y obras de mejora.

En Andorra

Habrá que esperar al 1 de diciembre para descender por las pistas de Grandvalira, en Andorra, la estación más grande de Pirineos y del Sur de Europa. 210 kilómetros de pistas y 118 pistas, un gran dominio esquiable resultado de la acertada unión de las estaciones de Soldeu el Tarter y Pas de la Casa/Grau Roig. La estación se caracteriza por la calidad de su nieve, la extensión de pistas y snowparks y su amplia red tanto de hoteles como de apartamentos a pie de pistas o en la propia capital, donde el shopping es la actividad apres-ski preferida, dados los reducidos impuestos en el principado. La joyita de la corona hotelera viene de la mano de la familia Calbó, toda una referencia andorrana, que ha convertido un antiguo cabañal para el ganado de su propiedad desde 1630 en uno de los alojamientos de nieve más exclusivos de Europa. Se trata de La Borda, a 1.850 metros de altura, en medio de las pistas de Grandvalira, y que debuta en su primer invierno asociado al referente de lujo andorrano, el Sport Hotel Hermitage.

Los Alpes

Aunque los Pirineos, de un tiempo a esta parte, han mejorado tanto en servicios como en instalaciones y facilidades para la práctica del esquí, nada como los Alpes para los españoles amantes del deporte blanco. Francia, Suiza, Italia y Austria se reparten las mejores estaciones del Viejo Continente. Las más codiciadas por la calidad de la nieve, extensión de dominios esquiables, modalidades deportivas, ambiente, alojamientos, acceso… Aunque no hay un ranking unánime, en todas las opciones, en todas las listas de los mejores destinos de turismo de nieve, figura invariablemente los Tres Valles, auténtico paraíso blanco. Les 3 Vallées, en su denominación original francesa, es el mayor dominio de esquí del mundo. Está formado por ocho estaciones conectadas por remontes mecánicos, 600 kilómetros de dominio esquiable en el corazón de los Alpes franceses. El 85 % de sus pistas está por encima de los 1.800 m, lo que garantiza el buen estado de la nieve desde estas fechas. Cuenta con estaciones de fama internacional como Méribel, Val Thorens y otras más pequeñas y familiares como Les Ménuires. Es precisamente Val Thorens una de las preferidas por los más aficionados a la práctica deportiva blanco, mientras que los más sibaritas se decantan en Los Tres Valles por la estación de Courchevel. Ninguna otra estación en Francia le iguala en el número de hoteles de super lujo: Aman, Cheval Blanc, Airelles o L’Apogée están aquí.

En Suiza

Sus vecinos suizos no se quedan atrás, naturalmente, y hacen gala tanto de calidad de nieve como de un ejemplar nivel de servicio y organización. Es difícil quedarse con una sola de las estaciones helvéticas: Gstaad, Zermatt, Verbier, Crans Montana... Cada una tiene su encanto, sus paisajes de ensueño, su ambiente chic donde no faltan las ostras ni el champán ni las celebrities ni las cabezas coronadas. Como la de Carlos de Inglaterra, fiel a la estación de Klosters desde hace décadas. Pero quizá la más legendaria de todas las suizas es St Moritz, que además goza de la condición pionera de haber sido el primer resort de nieve que abrió en invierno, hace más de 150 años. Es conocido también por su buen clima, pues el valle de la Engadina, donde se encuentra, es especialmente soleado. Se trata de un entorno natural impresionante que engloba, además de St Moritz, otras 12 estaciones, con un dominio esquiable de 350 kilómetros, si bien, no todo intercomunicado con remontes mecánicos. Su hotel de referencia es sin duda el Badrutt’s Palace y Drácula uno de los garitos nocturnos más legendarios del mundo.

En Austria, una de las estaciones con mejor cartel, es sin duda Kitzbühel. Cuenta con unas espléndidas pistas que abarcan 165 km y que incluyen el descenso más espectacular y peligroso de la Copa del Mundo, la famosa Hahnenkamm race. Se trata de un pueblecito encantador con un dato curioso: es la estación de esquí en el mundo con más estrellas Michelin.

Tampoco se come nada mal en Cortina d'Ampezzo, la reina de los Alpes Italianos, con la gran baza de estar enclavada en el soberbio paisaje de los Dolomitas. Además de sus 120 kilómetros de pistas, alguna legendaria como Olympia delle Tofane, ofrece magníficas opciones para los aficionados al esquí de fondo. Con cartel de estación glamurosa y cierto aroma a la dolce vita, acogerá en 2026 los Juegos Olímpicos de invierno.