Viajes
La ruta 66 de Portugal
Una ruta que se extiende a lo largo de 700 kilómetros y recorre los lugares más bonitos de Portugal
No hace falta viajar a Estados Unidos para embarcarse en una road trip. Solo hace falta cruzar la frontera para disfrutar de la misma experiencia, pero, esta vez, en Portugal.
Si estás buscando la escapada perfecta para este mes de septiembre, solo tienes que adentrarte en la ruta 66. Un recorrido que tiene todos los ingredientes para convertir el viaje en una experiencia memorable.
El itinerario discurre a través de la carretera N2 y atraviesa algunos los pueblos más bonitos de Portugal, donde poder disfrutar de la cultura y gastronomía del país.
De Chaves a Faro
La carretera conecta el pueblo norteño de Chaves con Faro, al sur del país. Junto a Chaves, encontramos la ciudad de Pedras Salgadas, conocida por su estación señorial y su gran parque termal.
Para descansar de las horas de viaje se puede parar en Viñedos del Douro, un extenso paraje lleno de miradores donde contemplar las vistas de extensos viñedos y montañas.
Una parada fundamental es Lamego, con su imponente castillo y Nuestra Señora de los Remedios, un impresionante santuario de piedra, similar al de Braga por sus innumerables escaleras.
A tan solo una hora en coche de Lamego, se encuentra el pueblo de Santa Comba Dao. Perderse por sus rincones es una buena idea si se quiere disfrutar de la cultura del país. Destaca el puente romano, los miradores del río Dao y sus pasadizos de madera. Si visitas el pueblo un miércoles, podrás comprar los productos más típicos en el mercadillo semanal.
Para los apasionados de la naturaleza, el recorrido incluye increíbles paisajes. Livraria de Mondego es una formación rocosa espectacular y Barragem do Cabril una presa con un paraje natural privilegiado.
Para hacer más inolvidable la visita, también puedes parar en el Centro geodésico de Portugal y presumir de haber estado en el centro geográfico del país.
Finalmente, hasta llegar a Faro, el recorrido sigue pueblos de arquitectura blanca y detalles azules, como Brotas. Por la proximidad de estos pueblos con la costa, podrás hacer alguna visita a la playa o parar para comer y conocer la gastronomía portuguesa.