Fundado en 1910

El único palacio español que está en la lista de los más bonitos del mundo

Utilizados durante siglos como residencias reales oficiales, a día de hoy se erigen como símbolos de riqueza y estatus, a la vez que muestran la personificación del buen gusto y el refinamiento en diferentes épocas y culturas. La revista AD elige los mejores y uno español ocupa la décima posición:

Cristina Blanco Vázquez
Cristina Blanco Vázquez

Madrid Actualizada 04:30

Versalles

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Palacio de Versalles (Francia)

Hablar de Versalles es hacerlo de un modelo a seguir para innumerables palacios reales de toda Europa. Lo que antaño fue un pabellón de caza construido en 1623 por Luis XIII se convirtió en la lujosa residencia de su hijo Luis XIV que hoy conocemos. Obra maestra de la arquitectura barroca, presume de sus espectaculares ventanales, numerosas puertas ocultas, sus magníficos jardines y, como no, su famosa Galería de los Espejos que acogía recepciones, bailes y audiencias de la Francia prerrevolucionaria.

Palacio de verano de Pekín (China)

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Palacio de verano de Pekín (China)

Data de la dinastía Qing (1644-1911) y refleja algunas de las mejores cualidades de la arquitectura tradicional china. Como lo describe la UNESCO, es «una expresión excepcional del diseño de jardines paisajísticos chinos, que integra las obras de la humanidad y la naturaleza en un conjunto armonioso». Fue reconstruido en su totalidad en la década de 1860 tras ser destruido en la Segunda Guerra del Opio. Posteriormente, la emperatriz Cixi supuestamente recurrió a fondos de la marina, desviando el dinero del gobierno para financiar la restauración del palacio.

Grand Palace (Thailand)

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Gran Palacio (Tailandia)

Completa el podio el Gran Palacio de Bangkok, reconocible por sus ornamentados pabellones, cuidadosamente decorados con finas decoraciones de pan de oro y agujas puntiagudas, este palacio combina la arquitectura tradicional tailandesa con toques de diseño neoclásico europeo. Dentro del Templo del Buda de Esmeralda se encuentra una magnífica y venerada estatua de Buda, tallada con maestría en un solo bloque de jade.

Castillo Neuschwanstein (Alemania)

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Castillo de Neuschwanstein (Alemania)

El Rey Luis II mandó construir este castillo en 1869 como un refugio perfecto para su carácter retraído que reflejara las leyendas medievales que a menudo le hacían soñar despierto. Construido en estilo neorrománico (con toques de influencia gótica y bizantina), sus imponentes agujas, ventanas arqueadas y complejas tallas de piedra son, sin duda, dignos de un cuento de hadas. No sorprende que sirviera de inspiración para La Bella Durmiente.


Palacio de Buckingham (Reino Unido)

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Palacio de Buckingham (Reino Unido)

El Palacio de Buckingham, la más conocida y visitada de todas las propiedades reales, sigue siendo la residencia oficial en Londres de los monarcas del Reino Unido desde 1837. Diseñado en un estilo neoclásico, el palacio tiene un total de 775 habitaciones, incluidas 188 habitaciones para el personal, 92 oficinas, 78 baños, 52 habitaciones reales y de invitados y 19 salas de estado.


Palacio de Montaza (Egipto)

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Palacio de Montaza (Egipto)

Originalmente construido como residencia real de verano para el Jedive Abbas II en 1892, el Palacio de Montaza ofrece una vista privilegiada del mar Mediterráneo. El palacio es una mezcla única de estilos otomano y florentino: la detallada ornamentación y los coloridos azulejos añadidos reflejan la influencia otomana, mientras que la alta torre cuadrada y las elaboradas cornisas evocan las villas renacentistas italianas.

Palacio da Pena (Sintra)

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Palacio da Pena (Sintra)

Imposible de perderlo de vista, incluso desde lejos. Y no solo por su majestuoso tamaño, sino por su extravagancia colorida. Con un exterior en rojo y amarillo y almenas decorativas, exhibe una combinación ecléctica y alegre de varios estilos arquitectónicos: gótico, manuelino, morisco y renacentista. Los detalles de diseño se extienden al interior del palacio, que luce techos de estuco y azulejos, las tradicionales baldosas cerámicas portuguesas.


Palacio de Linderhof (Alemania)

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Palacio de Linderhof (Alemania)

Inspirado en Versalles, el Palacio de Linderhof fue diseñado en estilo rococó, con estucos ornamentados, interiores dorados y suntuosas decoraciones similares al emblemático palacio francés. Los jardines que lo rodean combinan estilos paisajísticos barrocos e ingleses, con fuentes, estatuas y la famosa Gruta de Venus, una cueva artificial inspirada en las óperas de Wagner.

Palacio Mysore (India)

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Palacio Real Mysore (India)

Finalizado en 1912, este extenso palacio, repleto de cúpulas, arcos y una imponente fachada adornada con intrincadas tallas y esculturas, es un impresionante ejemplo de arquitectura indo-sarracena. Cada año, el palacio acoge el festival Dussehra, de 10 días de duración, y se ilumina a diario con casi 100.000 bombillas.

La Alhambra (Granada)

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La Alhambra (Granada)

Toda visita que se precie a Granada debe empezar por La Alhambra. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y candidata a ser una de las nueve Maravillas del Mundo, esta antigua ciudad palatina andalusí está compuesta por varios palacios, murallas y jardines. Además, se alza como el monumento más visitado de España y la obra cumbre del arte musulmán en toda Europa.

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