Archie morirá en el hospital tras la decisión de la justicia de no trasladarle a un centro de paliativos
La familia Battersbee ha perdido su última apelación al Tribunal Superior de Justicia de Londres
Archie Battersbee, el niño de 12 años en muerte cerebral tras un reto de TikTok, permanecerá en el Royal London Hospital, en el que lleva ingresado desde el pasado mes de abril y donde será finalmente desconectado de la máquina de respiración asistida que le mantiene con vida.
Este jueves, los padres de Archie, Hollie Dance y Paul Battersbee, habían apelado al Tribunal Superior de Justicia para poder trasladar al niño, que se encuentra en estado de muerte cerebral, a un centro de cuidados paliativos, donde según afirmó su madre, podría «morir dignamente». Este deseo ya lo expresó la familia a sus médicos, que respondieron que su condición era demasiado inestable y que el traslado podía resultar peligroso.
Este último recurso fue presentado por la familia después de que su apelación al Tribunal Europeo de Derechos Humanos dictaminase que no interferiría en las decisiones de la justicia británica, que había determinado que el pequeño tendría que ser desconectado, después de que sus médicos afirmasen que ya no podían hacer nada por él y que jamás despertaría.
Archie Battersbee se encuentra en el hospital desde el pasado 7 de abril, día en que su madre lo encontró con una cuerda al cuello en su casa de Southend, Essex. En una resonancia magnética, el 31 de mayo se le diagnosticó en muerte cerebral, lo que llevó a los médicos a determinar que ya no podían hacer nada por ayudarle y que nunca despertaría.